Vecinos del sector Reñaca en Viña del Mar criticaron la falta de protocolo tras ser testigos de la presencia de un lobo marino muerto desde la noche del martes hasta la mañana de este miércoles. Esto en medio de la contingencia por influenza aviar en animales.

Cerca de 12 horas permaneció un lobo marino muerto en el sector de Reñaca en Viña del Mar, región de Valparaíso, frente a la molestia y preocupación de vecinos y turistas, en medio de la contingencia por influenza aviar en animales.

Expertos señalaron que cuando aparecen animales acuáticos muertos, lo ideal es no acercarse ni tocarlos, a la espera de autoridades correspondientes.

Fue durante la noche del pasado martes que auditores reportaron la presencia de un lobo marino en el sector costero de Reñaca, situación que provocó la sorpresa de vecinas y vecinos.

Sin embargo, con la aparición del alba, el animal seguía en el sector, el que se encontraba sin vida, presentando heridas y rastros de sangre.

Esto no solo provocó la sorpresa de las personas que llegaron al sector, quienes catalogaron negligencia por parte del Estado en no tener un protocolo de seguridad en la fauna marina para hacer frente a este tipo de hechos.

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Conocidos los antecedentes, se dispuso a cerrar el perímetro donde se encontraba el animal, con el fin de que las personas no se acercaran, para también permitir el trabajo de las autoridades correspondientes.

Descartan caso de influenza aviar

Lo anterior generó expectación en las personas, luego de que se detectara un segundo caso de influenza aviar en un lobo marino encontrado en playa La Rinconada de la comuna de Antofagasta, confirmado por el Servicio Nacional de Pesca y Agricultura.

Al respecto, el infectólogo y director del Centro de Diagnóstico e Investigación de enfermedades infecciosas de la Universidad de Valparaíso, Rodrigo Cruz, entregó los detalles a seguir cuando se encuentra un animal acuático muerto.

Finalmente, desde Sernapesca informaron que el animal varó sin sintomatología asociada a influenza aviar, por lo que se coordinó con el municipio viñamarino su entierro.