El Juzgado de Garantía de San Antonio -región de Valparaíso- admitió la querella presentada por la familia de un adulto mayor de 89 años, en contra de su cuidadora, quien fue acusada de administrarle mal los medicamentos al paciente con el fin de no perder su trabajo.

Según la denuncia, la acusada incluso le administraba laxantes para los días en que ella se ausentaba, a modo de aumentar los días en que debía estar a cargo del adulto mayor.

Los hechos se registraron en el sector Santo Domingo de la comuna de San Antonio, desde donde los hijos del hombre afectado presentaron una querella que busca la condena de la mujer bajo los cargos del delito de trato degradante a persona vulnerable.

“La imputada, aprovechándose de su labor como cuidadora profesional de la víctima, intencionalmente, alteraba en forma continua y reiterada en el tiempo su medicación (quetiapina), dándole una dosis menor o mayor de la recetada por el médico tratante” indica la querella.

El documento expone además que, “también, le suministraba medicamentos que atendida su enfermedad, no necesitaba, como jarabes laxantes (lactulosa), entre otros. Todas estas acciones las realizaba en los días anteriores en que la víctima se encontraría sin su cuidado profesional, con el fin de alterar severamente su comportamiento normal y provocarle una descompensación metabólica”.

La confesión de la cuidadora asistente de la imputada

Según indica el medio El Líder de San Antonio, la familia de la víctima le buscó una cuidadora más una asistente al adulto mayor en condición de postrado.

Por lo anterior, buscaban un apoyo para la mejora de la salud de la víctima. Muy contrario del objetivo, la pareja del adulto mayor percibió que este último, en los días en que la cuidadora acusada no estaba, comenzó a presentar un comportamiento irascible e inestable.

Esta situación se habría extendido desde agosto del 2021, por lo que la familia decide discutir lo ocurrido con la ayudante de la cuidadora principal. Finalmente, ella decide confesar.

La trabajadora, según indica el medio Emol, facilitó los mensajes de WhatsApp donde la acusada le solicitaba que alterara las dosis de los tranquilizantes y laxantes al hombre mayor, justamente en los días en que ella se ausentaba. La víctima presentaba problemas para controlar esfínter, lo que dificultaba su cuidado para los familiares.

Por lo anterior, la demandada arriesga de 61 a 540 días de presidio.