“No tuvimos acceso al lugar porque nos iban a apedrear”, aseveró el superintendente del Cuerpo de Bomberos, Luis Sturione, tras el incendio que destruyó el Juzgado de Garantía de Rapa Nui, el que habría sido provocado por una turba que también sería la responsable de que los equipos de emergencias no pudieran llegar a controlar el siniestro.
Este martes, se formalizó a Juan Nahoe Hereveri, de 51 años, por apuñalar y provocarle la muerte a Alberto Araki Paoa, de 34, en la noche del lunes.
Mientras el imputado se encontraba en el tribunal, una turba comenzó con los incidentes que terminarían con el recinto y la notaría local quemados y con un linchamiento al acusado que quedó internado en estado grave.
Según LUN, aunque sonaron las alarmas dando aviso, no hubo mucho que pudieran hacer los bomberos, pese a que la compañía estaba a 250 metros del lugar del siniestro: sólo quedaron las paredes del juzgado.
Luis Sturione contó al diario que estaba volviendo de su trabajo cuando percibió un “olor a lacrimógena que era insoportable”.
“Al rato después comenzó el incendio y bloquearon todas las calles con vehículos. Prendieron el juzgado. No teníamos ninguna posibilidad de llegar. No tuvimos acceso al lugar porque nos iban a apedrear. Los carabineros no nos pudieron ayudar porque también estaban tratando salvarse“, relató el superintendente.
“Cuando tuvimos acceso, solamente tratamos de salvar los equipos electrógenos, que tienen estanques de combustible de 80 a 100 litros”, detalló Sturione.
El bombero aseguró que “no hay duda” de que el fuego fue provocado intencionalmente. “Tienen que haber tenido bombas tipo Molotov”, afirmó.
Sobre lo que se viene, Sturione explicó que seguirán atentos, pues se rumorea que pretenden incendiar la casa del presunto autor del homidicio.