La jefa de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco) de Valparaíso renunció luego que se conocieran irregularidades en la administración del estadio O’Higgins.
Sorpresiva fue la renuncia difundida este miércoles de Romina Maragaño, directora de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Valparaíso, luego que se conocieran irregularidades en la administración del estadio O’Higgins de la ciudad, edificio que depende del Departamento de Deportes, que a su vez está a cargo de la Dideco.
La razón sería su responsabilidad política en las irregularidades, donde los dineros que se recaudaban principalmente por concepto de arriendo de las dependencias del coliseo no habrían ingresado a las arcas municipales.
Claudio Opazo, administrador municipal, reconoció que la situación se debe a errores administrativos que no se corrigieron cuando se debía.
“El alcalde ha aceptado su renuncia en mérito de poder tener tranquilidad para poder avanzar y llegar al fondo del asunto”, explicó Opazo.
Una renuncia que fue catalogada como una muestra de “transparencia y valentía” por gran parte del Concejo Municipal.
“Me entristece la decisión que se tomó, pero a ella la enaltece, porque esta administración está haciendo las cosas diferente”, manifestó la concejala Ruth Cáceres.
“Cuando uno asume el cargo como director y pasa algo dentro de su departamento, la que tiene que asumir la responsabilidad sabemos que es el director, la directora. Aunque lo siento, hemos trabajado largamente en este tiempo con ella”, expresó por su parte la concejala Zuliana Araya.
El alcalde deberá decidir quién ocupará el cargo, debido a que se trata de un puesto de exclusiva confianza.