La Municipalidad de Viña del Mar implementará vigilancia con drones con cámaras en puntos complejos de la comuna desde enero próximo.
El anuncio lo realizó la alcaldesa Virginia Reginato en el último Consejo Comunal de Seguridad Pública.
No es una iniciativa surgida de manera espontánea en esta reunión, sino que era una posibilidad que hace rato se venía estudiando al interior de la actual administración comunal, tomando como referencia la experiencia de otros municipios como Las Condes en la región Metropolitana.
Jaime Varas, concejal de la Unión Demócrata Independiente (UDI) y miembro de la instancia municipal, aseguró que el gran objetivo de esta tecnología será aportar al trabajo de Carabineros, el Ministerio Público y el personal de Seguridad Ciudadana de la comuna, tanto como herramienta probatoria como en la reacción a otras emergencias.
“Hoy día nosotros tenemos los fenómenos de los incendios forestales, los rescates marítimos, que son necesidades y que obviamente estos drones van a ayudar”, expresó Varas.
Una de las que apoya también la medida es Cecilia Rodríguez, presidenta de la Junta de Vecinos de Limonares, quien incluso asevera que ellos ya han usado esta tecnología.
“Nos ha resultado bastante beneficioso (…), es por un resguardo y seguridad a nuestros sectores”, dijo Rodríguez.
Al otro lado de la vereda, María Adela Baeza, de la Junta de Vecinos Casino, resaltó que lo que más urge en el lugar son nuevas luminarias para el sector, algo que vienen pidiendo hace meses, y que en el caso que el uso de esta tecnología se concrete se debe garantizar el derecho a la privacidad y saber qué o cómo se usa el material recopilado por estas cámaras aéreas.
“Es importantísimo saber quiénes estarán administrando las grabaciones“, afirmó Baeza.
Andrés Rodriguez, abogado de uno de los estudios jurídicos más prestigiosos del país, Barros y Errázuriz, y experto en legislación sobre tecnología y telecomunicaciones, aseguró que la actual normativa sólo hace referencia a las características técnicas de estos aparatos y eso se entrecruza con las garantías constitucionales.
“En Las Condes esto fue aprobado por la Corte de Apelaciones y luego fue ratificado por la Corte Suprema, pero con ciertos límites. Tú puedes captar imágenes aéreas cuando estás cumpliendo con un deber como municipalidad de velar por la seguridad de tus habitantes, el problema es qué es lo que haces con las imágenes que recolectas”, manifestó Andrés Rodríguez.
En concreto, en enero próximo dos drones con cámaras comenzarán a funcionar como apoyo al sistema de televigilancia de la comuna, con un costo cercano a los 35 millones de pesos, dinero que fue aportado en parte por el municipio y en otra por la Subsecretaría de Prevención del Delito, en donde el municipio viñamarino postuló mediante concurso público.