A contar de la 14:00 horas de este lunes comenzarán a llegar los especialistas al Puesto Médico Avanzado (PMA), instalado en las inmediaciones del Hospital de Quintero.
Allí se realizarán atenciones programadas coordinadas por el Servicio de Salud, cuyo objetivo principal será monitorear la salud de las personas que presentaron síntomas de intoxicación durante la reciente emergencia ambiental en la zona.
“Durante la semana, seguiremos contactándonos con los usuarios que se vieron involucrados para asignarles una hora con los especialistas que corresponda”, detalló la directora subrogante del hospital de Quintero, la enfermera Carla Cardenas.
Los primeros profesionales en iniciar funciones serán un médico internista y un médico internista broncopulmonar. Entre el martes y el miércoles, se sumarán un neurólogo, un neurólogo infantil y un pediatra.
Durante la jornada se espera la presencia del subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, para monitorear el funcionamiento del Puesto Médico Avanzado.
Ante la emergencia, también se ha informado de la llegada de personal de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a observar la crisis que ha golpeado a Quintero y Puchuncaví.
Quien se adelantó fue la ministra de Medio Ambiente, Carolina Smichdt, que llegó este domingo en la zona y conversó con los habitantes de Quintero respecto a las medidas para mejorar la calidad del aire.
Sin alerta amarilla
La secretaria de Estado llegó a la zona justo un día después de que se bajara la alerta amarilla.
Dicha decisión se tomó tras la reunión del Comité de Emergencias regional la tarde del sábado, en la que se decidió que las clases se retomarán este martes 4 de septiembre.
Entre los motivos para levantar la alerta se consideró que ha habido una disminución drástica en los casos de personas con síntomas de intoxicación, los cuales prácticamente han desaparecido los últimos días.
Pese a ello, la preocupación persiste, ya que los incidentes de las nubes tóxicas han provocado la intoxicación de cerca de 300 personas -según las cifras del Minsal- desde el 21 al 24 de agosto.
Naturalmente, la desactivación de la alerta preocupa a la comunidad porque -según acusan- la autoridad aún no ha dado respuesta a su petitorio, que contempla -entre otras cosas- la paralización del parque industrial.
“Nadie nos ha garantizado que no nos vamos a volver a intoxicar. Todas las medidas son para enfrentar una nueva nube tóxica y no para prohibirla”, señaló uno de los 60 vecinos que se reunieron cerca de las 17:00 horas el domingo para protestar con el levantamiento de la Alerta Amarilla por contaminación en Quintero y Puchuncaví.
Si bien fue una convocatoria menor a las anteriores manifestaciones, los afectados se han reunido a diario en cabildos abiertos. Incluso, algunos de los manifestantes ya llevan seis días acampando en la Plaza del Deportista, renombrada Plaza de la Dignidad.
De paso, los convocados reclamaron además por la escasa transparencia que habría en las decisiones de la Intendencia de Valparaíso y de la búsqueda de los responsables.
“Olores ofensivos”
En medio de la emergencia, el ministro de Salud, Emilio Santelices, planteó que los síntomas presentados por los pobladores de Quintero y Puchuncaví pudieran deberse a “olores ofensivos” y no necesariamente dañinos para la salud.
Los olores “producen efectos organolépticos, es decir, el solo hecho que tenga un mal olor puede producir náuseas y vómitos, pero no implica una intoxicación”, señaló.
Sus declaraciones provocaron la inmediata crítica de la Municipalidad de Quintero por sus “muy irresponsables” declaraciones y de paso lo cuestionaron enérgicamente porque “aún no se tiene claridad de cuales podrían ser los efectos de la nube contaminante” que intoxicó a los vecinos afectados.
Asimismo, acusaron que Santelices estaría intentando “bajarle el perfil a una situación grave que está afectando a la comuna desde hace décadas y que esperamos no se vuelva a repetir”.
La crítica fue incluso más allá y llegó desde el mundo parlamentario. El presidente de la Comisión de Salud de la Cámara, el diputado socialista Juan Luis Castro, afirmó que el ministro Santelices se “precipitó” en su declaración.
“No cabe ninguna duda que hay niveles de daño que son perfectamente posible que estén ocurriendo en la salud humana”, aseguró.
A raíz de todo el revuelo que provocaron sus dichos, el sábado debió salir a pedir disculpas. A través de un comunciado, Santelices sostuvo que sus palabras “no buscaban minimizar los hechos antes señalados, sino, muy por el contrario, devolver tranquilidad a las familias de los niños afectados para despejar que los síntomas de los que fueron objetos vayan a causarles problemas de salud más adelante”.
“Lamento si alguien se sintió afectado y ofrezco mis más sinceras disculpas”, añadió mediante la misiva difundida a través de su cuenta en Twitter.