Parlamentarios de la región de Valparaíso llegaron hasta la Contraloría para solicitar que este organismo investigue un posible conflicto de interés entre el Gobierno y el Directorio de Oxiquim, apuntado por varias voces como una de las empresas que provocaron la emergencia de la semana pasada en el Cordón Industrial Quintero-Puchuncaví.
Desde el Gobierno, en tanto, llamaron a la oposición a no politizar el tema y a aportar soluciones concretas para enfrentar la crisis.
Se trata de los diputados de la Democracia Cristiana Daniel Verdessi y su homólogo del Movimiento Autonomista, Diego Ibáñez, que llegaron hasta la oficina del órgano contralor para solicitar su intervención.
Los dardos de los parlamentarios apuntan hacia la empresa Oxiquim Sociedad Anónima, sindicada por diversos sectores, entre academicos expertos y el propio Colegio Médico, como una de las verdaderas causantes de la crisis medioambiental en Quintero.
Su directorio es encabezado por Fernando Barros Tocornal, quien durante años fue el abogado del presidente Sebastián Piñera, y quien incluso aparece nombrado en el libro “Empresarios zombis” como uno de los gestores de la presunta evasión tributaria llevada adelante por las empresas del actual mandatario.
Barros, además fue socio de Gonzalo Molina en el estudio jurídico Barros y Errazuriz, quien a su vez, es el marido de la actual ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, tal como lo detalló el parlamentario Diego Ibáñez.
Por su parte, el DC Daniel Verdessi, definió como extraña la actitud del Gobierno de apuntar de manera prematura a Enap como la gran causante de la emergencia medioambiental, asegurando que tiene antecedentes fundados para aputar a Oxiquim como unos de los responsables.
En tanto, la Ministra utilizó su cuenta de Twitter para responder a este emplazamiento, señalando que agradecía la intervención de la Contraloría, para así demostrar que no tiene incompatibilidades para ejercer su cargo.
Por su parte, el intendente de Valparaíso, Jorge Martínez, señaló que no era prudente enfocarse en informaciones que poco o nada aportarían a la solución del problema que existe en la llamada Zona de Sacrificio.
Solicitud ante el órgano contralor que se suma a los dos informes solicitados por Enap a la consultora medioambiental Algoritmos, donde se señalan que en sus faenas no existe la presencia de los 3 gases catalogados como los presuntos responsables de la masiva intoxicación en Quintero y Puchuncaví.