Un total de 130 metros lineales de cortafuegos -de alrededor de tres metros de ancho- fueron construidos en el perímetro de la administración del Santuario de la Naturaleza Laguna El Peral, en la comuna de El Tabo, provincia de San Antonio.
Al respecto, el director regional de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) en la región de Valparaíso, Héctor Correa, explicó que la intervención tiene como objetivo prevenir la propagación de siniestros que pueden dañar el ecosistema del área protegida.
Tarea que se efectuó mientras el lugar se encontraba cerrado como medida preventiva debido a las condiciones propicias para la ocurriencia de incendios forestales.
Por su parte, el administrador del santuario de la naturaleza, Ignacio Miranda, manifestó que la lluvia caída en la zona promediaba anualmente sobre los 500 milímetros de agua, mientras que en la actualidad sólo alcanza los 200.
Dicha situación ha provocado una evaporización del recurso hídrico de la laguna y la desecación de los bosques aledaños, con el consecuente riesgo de emergencias forestales.
Esta situación motivó la acción con la que se despejó toda esta área circundante al sector de administración de cualquier tipo de vegetación, para poder impedir la continuidad de algún incendio forestal, si es que se llegara a generar.