La Fiesta de La Tirana, una celebración religiosa que se realiza en julio en el norte del país, vuelve a vivir momentos de tensión debido al aumento de casos de covid-19.
En conversación con el programa Expreso PM de La Radio, el sacerdote Franklin Luza, quien es vocero actual del equipo de preparación de esta celebración dijo que “es un acontecimiento que supera con creces los límites de una fiesta religiosa”.
El padre Luza fue rector del Santuario de La Tirana durante 18 años y dijo que se han vivido momentos muy duros en torno a esta fiesta.
“La Fiesta de La Tirana es un acontecimiento mucho más amplio de lo que podría entenderse como una fiesta católica. Es un acontecimiento social, es el elemento que marca clara y absolutamente la identidad del norte”, precisó el sacerdote.
El vocero también dijo que se trata de “un encuentro social de todo el norte. Y que estamos muy cercanos a cumplir 500 años, es decir, es una historia tan importante en cuanto al tiempo como a la historia de Chile”.
“Aquí confluyen los bailes religiosos, los peregrinos, la Iglesia en cuanto a institución, confluyen en esos 10 días, en la que vienen innumerables personas de baile religioso organizado de Antofagasta, Calama, Tocopilla, Iquique, Pedro de Valdivia, María Elena, gente del sur del Perú, de Bolivia”, detalló el vocero.
Tensión sobre la Fiesta de La Tirana
El padre Franklin Luza dijo que desde “el 17 de abril estamos en reuniones permanentes con las autoridades sanitarias, porque somos responsables también y no se trata de hacer un gallito y ver quien gana”.
“A nosotros nos encantaría hacer la fiesta por las significaciones que tiene, pero si la fiesta tiene riesgos graves, por supuesto hay que ver la forma o de suspenderla o de cambiarla y realizarla de la manera que sea más segura, pero que lo digan”, manifestó el vocero de este evento.
El sacerdote recalcó que “el 17 de abril hicimos la primera reunión, nos pidieron una serie de cosas que llevar. Presentamos un programa reducido, en la que se cambiaron los principales lugares, se evitaron las aglomeraciones, propusimos cerrar la plaza y nos dijeron que la próxima semana. No se ha tomado la decisión y no se toma hasta ahora”.
“Si hay que suspender la fiesta, que la suspenda la autoridad sanitaria o del Gobierno, pero nadie lo quiere hacer porque les cuesta asumir. Se dan cuenta que es una decisión que va a significar una reacción muy importante de la gente”, señaló Luza, quien lleva más de 40 años trabajando en el equipo de la fiesta.
Así también señaló que les dijeron que “la última cosa será el 30 de mayo, la resolución. Estamos a 13 de junio y todavía no dicen vamos a esperar que se reúna el gobernador con el delegado presidencial (…) A esta altura es una irresponsabilidad absoluta de todas partes de decidir sobre la fiesta”.
Vocero de la Fiesta de La Tirana: “No se puede improvisar”
“La Fiesta de La Tirana no es una fiesta que se pueda improvisar. La gente que viene de Arica, de Calama, de Antofagasta, necesita contratar camiones, buses, ya los debe haber contratado”, indicó el sacerdote.
A esto añadió que ellos “necesitan pagar a las bandas que son de costos millonarios, ya tendrían que haberlo resuelto. Necesitan arrendar casas, porque todo el mundo viene (…)”.
“No hay más camino que hacer la fiesta, con las restricciones que sean necesarias. Nosotros hemos hecho todo lo que se ha pedido (…) no aceptamos a nadie sin Pase de Movilidad, hemos organizado las actividades para que haya lo menos posible de amontonamientos, no va a haber ninguna actividad en el santuario mismo”, señaló el vocero.
Finalmente, Luza afirmó que esperaban “tener ya un mínimo de respuesta, ahora y creo que no hay vuelta, hay que hacerla con las medidas que sea y como salga”.