Por el delito de homicidio fueron condenados los dos acusados a las penas efectivas de 12 años y 5 años y un día de presidio, respectivamente, por la muerte de un hombre ocurrida en febrero de 2019, en las afueras de las discoteques de Bajo Molle.
Según pudo acreditar el fiscal de Delitos Violentos, Francisco Almazán, Jonathan Corimanya Hanco y Mirko Castillo Andrade, llegaron hasta el sector Bajo Molle de Iquique, lugar donde advirtieron que la víctima Juan Gutiérrez Mamani se encontraba en un vehículo estacionado frente al local nocturno “El Castillo”, situado en avenida la Tirana.
Debido a problemas anteriores y previamente concertados, Corimanya condujo un vehículo hasta un sector cercano al automóvil en que estaba la víctima, procediendo Castillo junto a un tercer individuo no identificado, a bajarse y aproximarse al afectado.
Allí, Mirko Castillo extrajo desde vestimentas un arma de fuego con la que apuntó directamente a la víctima, realizando al menos dos disparos, uno de los cuales le impactó en la cabeza. De inmediato, ambos sujetos huyeron en dirección al vehículo donde esperaba Corimanya, huyendo del lugar.
En el juicio oral la Fiscalía presentó los testimonios de testigos presenciales, quienes explicaron que las rencillas anteriores entre los acusados y la víctima tenían que ver con el hurto de una importante cantidad de dinero relacionada con el tráfico de drogas.
Terminado el juicio, y considerando que el acusado Mirko Castillo Andrade tenía condenas previas por otros delitos, el Tribunal Oral En Lo Penal resolvió condenarlo a la pena de 12 años de presidio como autor del delito de homicidio; mientras que el acusado Jonathan Corimanya Hanco, quien tenía irreprochable conducta anterior, fue condenado a 5 años y un día de presidio por el mismo ilícito.