Más de 500 bolivianos se encuentran varados en Colchane, según las cifras del municipio, los que intentan cruzar la frontera a su país en medio del cierre de los pasos por la pandemia de coronavirus.

Por ahora el municipio les ha ayudado con agua potable, alimentación, abrigo y baños químicos, pero aseguran que no cuentan con los recursos necesarios.

Por eso es que el alcalde de Colchane, Javier García, pidió ayuda al Gobierno y al Ejército. Según la autoridad comunal, la mayoría de las personas varadas llegaron caminando desde Huara.

“Nosotros advertimos al Gobierno y le solicitamos poder frenar el paso de personas hacia nuestra comuna, sin tener la acogida (del) el Gobierno Regional en su oportunidad ni tampoco del general Paiva”, sostuvo.

Asimismo, hizo un “llamado a las autoridades chilenas, al Gobierno Regional, al Ejército, a darle al menos una atención humanitaria, y al gobierno boliviano, que de una vez por todas se haga responsable de sus ciudadanos”.

Por su parte, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, sostuvo que la mayor complicación ha sido el cierre de las fronteras por parte de los países vecinos.

En relación a los ciudadanos bolivianos, el cierre de fronteras de los países vecinos ha significado un cierto deterioro al derecho internacional, consagrado a repatriación y ahí quiero decir que la Cancillería está haciendo un trabajo como corresponde, silencioso pero muy notable que ha permitido liberar algunas de estas restricciones y en otras ha habido más dificultades.

Mientras, la senadora de la Democracia Cristiana, Ximena Rincón, pidió al canciller Teodoro Ribera redoblar los esfuerzos para traer de regreso a chilenos varados en distintos lugares de Perú y para asistirlos en la espera, por ejemplo, revisando con La Moneda recursos para las personas varadas en el país vecino.