El miércoles, en el Tribunal de Rancagua, se realizó la formalización en contra de tres funcionarios de la Policía de Investigaciones de O’Higgins, quienes son indagados por los delitos de obstrucción a la investigación y omisión de denuncia.
Todo esto relacionado con el robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido en Rancagua, en agosto de 2024.
El fiscal jefe de Alta Complejidad de O’Higgins, Javier Von Bischoffhausen, comentó detalles de la formalización. “Son delitos muy graves e importantes”, señaló el persecutor, particularmente, porque no se hizo la denuncia como le corresponde a un funcionario público.
“Ellos tuvieron, con tres semanas de anticipación al robo Brinks del 16 de agosto, información concreta de la cantidad de sujetos que iban a participar, periodo de tiempo en el cual iban a cometer el delito, contaban con armamento de guerra, con vehículos robados y, a pesar de aquello, ninguno de estos tres oficiales hizo la denuncia al Ministerio Público”, precisó el persecutor.
Recalcando que “funcionarios de la Policía de Investigaciones, de al menos 15 años de trabajo, no estimaron pertinente que había que hacer la denuncia. Incumplieron con la obligación legal que tiene todo funcionario público a hacer la denuncia”.
Por su parte, la defensa de los oficiales descarta de plano que no hay delito en el actuar de sus defendidos.
El abogado defensor público, Cristian Godoy, comentó que los hechos futuros no pueden ser parte de una omisión de denuncia, por lo que sus defendidos no habrían cometido delito.
“Entendemos que no hay delito. Ellos cumplieron con la obligación de informar (…) Ellos informaron a la jefatura (…) los hechos futuros no son denunciables”, manifestó el jurista.
Finalmente, fuentes de La Radio informaron que el Consejo de Defensa del Estado presentó una nueva querella en contra de los tres funcionarios de la PDI, abriendo una arista en este caso.
La investigación continúa y la Fiscalía no solicitó medidas cautelares para los tres funcionarios policiales.