El Tribunal Oral en lo Penal de Chillán sentenció a presidio perpetuo a un hombre que violó reiteradamente a su hija de 12 años, quien tuvo un bebé a causa de los ataques sexuales, en San Nicolás, en la región de Ñuble.
En el juicio, la fiscal Claudia Zárete Rojas pudo acreditar -con base a la investigación y las pruebas rendidas- la autoría del sujeto en cinco violaciones, además de un abuso sexual que cometió contra la víctima en 2023.
La persecutora explicó que “el tribunal consideró, particularmente para dictar esta sentencia, la gravedad de los hechos como la extensión del daño causado a la menor, toda vez que producto de estas violaciones reiteradas resultó embarazada”.
También se consideró el vínculo entre la víctima y su agresor, quien al ser el padre biológico estaba al cuidado de la niña.
La Fiscalía investigó estos hechos con la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) de la Policía de Investigaciones (PDI), la que logró reunir las pruebas que permitieron arribar a esta condena.
Esta es una de las penas más altas de nuestro ordenamiento jurídico, pues el condenado deberá pasar, al menos, 20 años en la cárcel antes de poder optar a algún beneficio intrapenitenciario.