El Tribunal Oral en Lo Penal de Chillán sentenció a presidio perpetuo calificado a Ricardo Neira Arriagada por el femicidio íntimo de Carolina Fuentes Bustos ocurrido en junio de 2020 en la región de Ñuble.
Recordemos que el pasado 18 de julio, durante la audiencia, se confirmó que el acusado mantuvo una relación sentimental con la víctima e incluso vivieron juntos entre los años 2015 y 2016.
“En dicho contexto, con fecha 15 de junio de 2020, Carolina Fuentes viajó desde la capital hasta la localidad de Ninhue con la intención de realizar un trámite familiar, quedándose en casa de su hermano”, señala el fallo.
Fue en junio de 2020 que la mujer desapareció tras viajar desde Santiago a Ninhue y luego a Portezuelo, para trasladarse a la casa del ahora condenado Ricardo Neira.
Entre el 25 y 30 de junio la mujer estuvo en dicho inmueble, sin embargo, tras una discusión, el hombre la asesinó.
Para intentar eludir a la justicia, el imputado envió mensajes a la familia de la mujer, haciéndose pasar por Carolina Fuentes; sin embargo, la Policía de Identificaciones lo descubrió.
Un total de 95 días pasó desaparecida Carolina Fuentes, hasta que su cuerpo fue encontrado el 5 de octubre en la ribera del río Ñuble.
Sentencia con perspectiva de género por femicidio de Carolina Fuentes
En este caso, el presidio perpetuo calificado contempla la privación de libertad del condenado, que tiene una serie de reglas.
Estas son el no poder acceder a cualquier beneficio antes de transcurridos 40 años de privación de libertad efectiva, cumpliendo normas y requisitos, así lo informó el Ministerio Público.
La Fiscal Regional de Ñuble, Nayalet Mansilla Donoso, destacó que el tribunal “fallara con perspectiva de género”, producto de que en el juicio el fiscal Álvaro Hermosilla expuso la situación de violencia permanente que ejercía el condenado sobre la víctima y sus acciones desplegadas tras la muerte, lo que implicó esconder su cuerpo e, incluso, implantar pruebas falsas.
Antecedentes de la causa por femicidio de Carolina Fuentes
Carolina y Ricardo discutieron el 30 de junio, por lo que la mujer se subió a la camioneta del imputado. Según los detalles, este impidió que la mujer lograra escapar y la asfixió con un lazo amplio, liso y suave.
El fiscal, Álvaro Hermosilla, indicó que “la forma de muerte no es algo accidental, porque ese es un acto de dominio, debe ser leído como un acto propio de violencia contra la mujer”.
Otro dato que se conoció, es que ambos se conocieron y pololearon en la etapa escolar, sin embargo, esto no prosperó en ese momento y lo retomaron años más tarde. Entre 2015 y 2016 mantuvieron una relación sentimental, agregó el fiscal, e incluso habrían convivido.
La relación entre ambos “siempre estuvo teñida de violencia”, indicó el fiscal.
A los 53 testigos y 24 peritos, además de las pruebas, se suman peritajes como la geolocalización de tráficos telefónicos, ya que desde el teléfono de la víctima salieron mensajes dirigidos a su familia, días después de su desaparición. Dichos textos apuntaban a que tenía planeado ir al sur. Esto nunca fue real.