Aunque fue absuelto de la acusación por femicidio, el conviviente de Glenda Delgado Cárdenas no recuperó su libertad. El Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas lo sentenció a cuatro años de cárcel por quebrantar la orden de alejamiento que existía a favor de la víctima fatal.
La sentencia se leyó ayer por vía telemática, pero los familiares de Glenda llegaron a dependencias del tribunal para manifestar su descontento con la sanción impuesta. Colgaron letreros con su rostro en las rejas y gritaron consignas.
Entre los asistentes se encontraba la madre de la víctima, Ida Cárdenas, quien dijo que “para mí cuatro años no es nada. Lo que necesitamos es que la fiscal y los abogados del SernamEG apelen para que pase a ser sentenciado por femicida, eso es lo que a nosotros nos interesa. El tipo asesinó a mi hija”.
Cárdenas agregó que “nosotros esperamos dos años tranquilamente, porque estábamos seguros que el juicio iba a ser justo, y para mí esto no es justicia”.
La sobrina de la víctima Gabriela Delgado también manifestó su pesar por la pena impuesta. “Claramente fue un femicidio. Ella no le hacía daño a nadie”, señaló con una fotografía de Glenda en sus manos.
Sujeto es sentenciado por desacato
El desacato quedó en evidencia la mañana del 28 de diciembre del 2019, cuando el cuerpo de Glenda aún yacía sin vida en un sitio eriazo contiguo al Estadio Fiscal.
Mientras realizaban el procedimiento por hallazgo de cadáver, los carabineros vieron que el acusado abandonaba la improvisada vivienda que compartía con la víctima, ubicada a solo metros de donde se encontró el cuerpo.
El sujeto no podía vivir con Glenda, pues pesaba sobre él una prohibición de acercamiento por una causa de violencia intrafamiliar.
El hombre se dio a la fuga tras advertir la presencia policial. Se escondió dentro de un gimnasio de la Corporación de Deporte del Personal de Enap (Cordenap), pero Carabineros logró detenerlo.
Absuelven a único acusado en muerte de Glenda Delgado
La Fiscalía sindicó al acusado como el autor de la muerte de Glenda. Según su acusación, el hombre destruyó el celular de la víctima con un hacha. Luego la habría golpeado y asfixiado. La mujer salió del lugar y caminó erráticamente por algunos metros, pero luego se desplomó y falleció.
Sin embargo, el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas lo absolvió por el presunto femicidio y los daños en el celular.
Según el veredicto, “la prueba no fue especialmente precisa. Especialmente se deben analizar las primeras intervenciones de la PDI al cadáver, como el perito médico legal, que hacen tangible la existencia de dudas razonables”.
El único delito que se pudo acreditar fue el desacato, por ende, el sujeto fue condenado a cuatro años de cárcel, pero se le abona el tiempo que lleva en prisión preventiva.