El jueves se inició el juicio en contra de Wenchuang Jin, quien está acusado de violar a una de sus empleadas en el “mall chino” que se ubica en el sector norte de Punta Arenas, en la región de Magallanes.
Si el sujeto es hallado culpable, el tribunal podría condenarlo hasta con 10 años de cárcel.
El joven de 26 años es un ciudadano chino y, al momento de los hechos, era socio del local comercial.
Comerciante acusado de violar a empleada
Según la acusación de la Fiscalía, el 20 de diciembre de 2019 el acusado participó de un asado junto a otros trabajadores de la empresa en un inmueble ubicado en calle Capitán Serrano.
Tras compartir en el domicilio, el grupo se trasladó a la discoteca Club K, en el centro de la ciudad. La fiesta concluyó en el “mall chino”, ubicado en Avenida Presidente Frei Montalva con calle Hornillas, donde continuaron bebiendo alcohol.
Ya en la madrugada, solo cuatro personas continuaban la velada en el “after”, entre ellas la víctima -que tenía 19 años- y su jefe.
De acuerdo con la acusación, la afectada se encontraba en estado de ebriedad y se quedó dormida en un sillón, donde luego el imputado la habría atacado sexualmente.
La víctima constató heridas de carácter ginecológico y propias de un ataque sexual. También resultó con moretones en su cuello y mandíbula.
“Yo confío en la ley chilena y yo no lo hice”
El hombre estuvo casi todo el 2020 en prisión preventiva, pero la medida se modificó por el arresto domiciliario tras surgir nuevos antecedentes en la investigación.
El joven concurrió al Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas para el juicio en su contra y, voluntariamente, prestó declaración. Desconoció los hechos y acusó intereses económicos de la víctima.
“Yo ninguna vez toqué a la señorita, por eso no voy a pagar ningún peso a la víctima. Yo confío en la ley chilena y yo no lo hice”, dijo ante los jueces con la ayuda de una traductora facilitada por la embajada China.
Arriesga hasta 10 años de cárcel
La Fiscalía y el Centro de Atención a Víctimas de Delitos Violentos tienen una versión distinta. Lo acusan de violación y solicitan que pague seis y 10 años de cárcel, respectivamente.
“La víctima no presta ningún tipo de consentimiento a la ejecución de estos actos de significación sexual”, dijo en su alegato inicial el fiscal Fernando Dobson.
Finalmente, el juicio está programado para cinco jornadas. Durante su desarrollo se espera la comparecencia de 22 testigos, cuatro peritos y la rendición de abundante prueba documental.