La mañana de este miércoles se dio a conocer el fallecimiento de Cristina Calderón, la última hablante nativa Yagán.
Su deceso se produjo en el Hospital Clínico de Magallanes, según fue confirmado por su hija, la constituyente Lidia González.
Respecto a las causa de su fallecimiento, se informó que habría sido producto del covid-19, según publicó diario El Pingüino.
La “abuela” Cristina
La “abuela Cristina”, como era conocida, era Hija Ilustre de la región de Magallanes y Antártica Chilena, y última representante del pueblo Yagan.
Cristina Calderón nació un 24 de mayo de 1928 en la zona de Róbalo, en la Isla Navarino, a unos pocos kilómetros de Puerto Williams.
Tuvo 9 hijos, 7 de ellos vivos; 14 nietos, y numerosos bisnietos.
La “abuela” Cristina, como cariñosamente le llamaban los pobladores, era una mujer muy activa en Villa Ukika, a orillas del Canal Beagle.
De hecho, habitualmente se la podía ver trabajando en cestería con juncos, por medio de una técnica utilizada por sus antepasados y que se había encargado de mantener viva.
Además, participó de manera activa en el Club de Adulto Mayor, Rosa Yagan, según indicó Prensa Antártica en su oportunidad.
Cristina Calderón, última testigo del Pueblo Yámana
Cristina Calderón, era la última testigo del Pueblo Yámana y única hablante de su lengua originaria.
Su vida y la de su pueblo han sido objeto de inspiración para los más destacados estudiosos, historiadores, científicos e investigadores que llegaban todos los años hasta Villa Ukika para conocer un poco más de ella y su cultura.
Por lo mismo, fue reconocida por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes como Tesoro Humano Vivo, en el marco de la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Inmaterial, adoptada por Unesco en 2003.