Un posible brote de covid-19 entre personal de las Fuerzas Armadas encendió las alertas en la Base General Bernardo O’Higgins que mantiene el Ejército de Chile en la Antártica, tras la visita operativa del buque de la Armada “Sargento Aldea”.
Cerca de 10 días estuvo desplegada en el continente blanco cumpliendo labores de sostenimiento logístico la nave comandada por el capitán de navío, Gastón González, tras iniciar la travesía con más de 200 efectivos de la Armada.
Es así como el LSDH-91 “Sargento Aldea” inició su recorrido el pasado 27 de noviembre desde Punta Arenas, ciudad donde abordaron la nave algunos miembros del Ejército para apoyar en las tareas.
Durante los últimos días comenzó la incertidumbre luego de que que 2 de los integrantes del Ejército, que desembarcaron a la vuelta del viaje en Punta Arenas, dieran positivo por covid-19, consigna La Prensa Austral.
La situación es compleja, pues unos 35 miembros de la Armada -que continuaron a bordo de regreso al puerto de Talcahuano- han presentado sintomatología asociada a la enfermedad, razón por la que el buque se mantiene en alerta y todavía no recala en su destino a la espera de los resultados de los exámenes PCR.
Según el citado medio, este miércoles por la tarde un correo anónimo -que habría sido enviado desde la Base O’Higgins a las autoridades de salud y otros estamentos- daba cuenta que algunos integrantes de la dotación del Ejército en la Antártica tendrían síntomas.
En este contexto, los representantes de las instituciones involucradas se reúnen este jueves para determinar las medidas y protocolos a seguir, así como para determinar que falló en el protocolo por coronavirus.
Se espera que durante la jornada haya un pronunciamiento oficial de la Armada y/o el Ejército.