Sin concretar permanece la habilitación del cementerio indígena de Rupumeica Alto en Lago Ranco, región de Los Ríos, generando múltiples inconvenientes para quienes deben sepultar a sus seres queridos en otro punto de la comuna, tardando todo el día para efectuar un funeral.
Para quienes viven en la ciudad, ir al cementerio o al Parque del Recuerdo solo tarda algunos minutos, panorama opuesto a lo que ocurre en la apartada localidad ubicada en plena zona precordillerana de la comuna.
Se trata de una zona aislada, habitada principalmente por integrantes de la comunidad indígena. Lejos de todo, llevan años esperando contar con un cementerio en dicho punto.
En los últimos meses del 2024, el tema fue expuesto a través de Radio Bío Bío por el presidente de la comunidad, José Jaramillo, asegurando que poseen un terreno de una hectárea destinado para cementerio y solo falta el cierre perimetral para contar con la autorización de uso.
En esa oportunidad, indicó que el cierre sería asumido por la Municipalidad de Lago Ranco, pero hasta ahora, aquello no se ha concretado.
Por lo tanto, cuando fallece algún integrante de la comunidad, deben continuar efectuando las sepulturas en Rupumeica Bajo, recorriendo, en medio del dolor, un camino que no se encontraría en buen estado, tardando gran parte del día.
Aquello ocurrió nuevamente este lunes. En contacto con La Radio, Herman Jaramilllo, otro integrante de la comunidad, narró que en medio del funeral de su madre, la carroza quedó en panne a mitad de camino, por lo que finalmente la ceremonia fúnebre les tomaría todo el día, expresando el dolor por no contar con un cementerio en la propia comunidad, para evitar ese tortuoso camino.
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Radio Bío Bío tomó contacto con la Municipalidad de Lago Ranco, para conocer los avances en las gestiones del cierre perimetral donde se pretende habilitar el cementerio de Rupumeica Alto, sin embargo, hasta ahora no se han referido a lo anterior.
Meses atrás, la respuesta del municipio fue que resultaba muy costoso cerrar la hectárea completa, evaluando cerrar solo un cuarto del terreno, lo que hasta el momento sigue siendo sólo una promesa.