Este jueves se revisará la prisión preventiva del imputado por el incendio en el café La Última Frontera y otros inmuebles ocurrido a principio de este año, instancia en que se discutirá la sustitución de dicha medida cautelar.

Reducida a cenizas quedó la casona que albergaba dicho restaurante, la que estaba ubicada en la esquina entre las calles Pérez Rosales y Yerbas Buenas, siniestro que también afectó a las oficinas del Centro de Promoción Cinematográfica de Valdivia y a las dependencias de la cooperativa La Manzana.

Un incendio por el cual fue detenido un ciudadano brasileño de 37 años, Bruno Miguel Paredes Biscaino, extrabajador del café La Última Frontera, que confesó haber iniciado el fuego que destruyó los inmuebles.

Tras su formalización por el delito de incendio con peligro para las personas, el imputado quedó en prisión preventiva, medida cautelar que será revisada este jueves.

Sumado a la destrucción de los inmuebles, el siniestro afectó económicamente a quienes ocupaban el espacio.

Si bien evitó referirse a la audiencia de revisión de medidas cautelares, la gerente general de la cooperativa La Manzana, Jana Rohrbach, precisó que en el incendio tuvieron pérdidas cercanas a los 50 millones de pesos.

A 10 meses del amargo despertar y de las consecuencias económicas, Rohrbach indicó que lograron levantarse y ahora están funcionando en otro inmueble ubicado en calle Baquedano, aunque recalcó que la situación sigue siendo compleja al trasladarse a otro punto de la ciudad que está lejos del centro.

Sin embargo, Rohrbach explicó que el traslado a calle Baquedano ha provocado que se acerquen nuevos clientes, como los vecinos del sector.

Mientras tanto, la prisión preventiva que pesa sobre el autor confeso de este incendio será revisada este jueves en el bloque de las 09:00 horas en el Juzgado de Garantía de Valdivia, instancia en que se discutirá la sustitución de dicha medida cautelar.