Tras años de espera y luego de una serie de inconvenientes, el pasado sábado comenzó a funcionar la barcaza que busca mejorar la conectividad de los habitantes del sector Llancacura de La Unión, región de Los Ríos.
No hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague. Esta frase cobró sentido para los vecinos de esta apartada localidad, ubicada a orillas del Río Bueno y que desde el 2017 esperaban ver la embarcación, para dejar atrás años de problemas de acceso a servicios básicos como atención de salud o efectuar compras y trámites en la zona urbana.
Luego de una serie de contratiempos, por fin comenzó a operar la barcaza que les permitirá conectarse de forma oportuna con la vecina comuna de San Pablo, en la región de Los Lagos, lo que resulta más ágil que transitar por el camino hacia La Unión, una vía de ripio, llena de curvas y quebradas, que con la lluvia del invierno queda intransitable, según el testimonio de vecinos.
De hecho, las ambulancias no pueden llegar al sector en esas condiciones y en más de una oportunidad, embarazadas o personas en estado grave han dependido de la voluntad de vecinos para llegar a un recinto asistencial.
En otros casos, pacientes de diálisis debían levantarse de madrugada para atravesar el río en lancha, con el riesgo de ser arrastrados por la corriente, para asistir a las sesiones.
Así lo narró en su discurso la vocera de los vecinos, Valeria Díaz, describiendo lo que le tocó vivir en carne propia con su padre. Es por ello que tras el largo camino recorrido, asegura que ella y sus vecinos el sentimiento es solo uno: tranquilidad.
Tu navegador no soporta audio en HTML5
La llegada de la barcaza se convirtió en una fiesta para los vecinos y también estuvieron presentes autoridades.
Al respecto, el delegado Presidencial de Los Ríos, Jorge Alvial indicó que el Gobierno invirtió cerca de mil millones de pesos en la refacción de la barcaza y también para el subsidio que le permitirá operar durante los primeros tres años.
Tu navegador no soporta audio en HTML5
Pero la puesta en servicio de la barcaza es el capítulo de final de una extensa novela de retrasos que comenzó el 2017, marcada por las dificultades para trasladarla desde Valdivia a Llancacura, lo que obligó a dividirla en dos y montarla en camiones.
Luego, vino una fallida licitación para definir al operador de la nave y los cuestionamientos de los interesados que no se adjudicaron el proceso.
Por último, se anunció el inicio de operaciones, retractándose horas después porque faltaba el visto bueno de la Armada.
Por fortuna todo eso ya es cosa del pasado y la barcaza -destinada al sector Llancacura de La Unión- con capacidad para 2 vehículos y once pasajeros, que será gratis para los peatones, se encuentra operativa.
Más allá de una estructura de fierro, para los vecinos de Llancacura, es el medio para sentirse más cerca del resto del territorio.