La Superintendencia de Electricidad y Combustibles descartó la presencia de gas licuado y metano en el Edificio Doña Isidora de Valdivia, tras las mediciones realizadas por una empresa externa.
Los vecinos del lugar cuestionaron que las muestras fueron tomadas a casi un mes de la explosión, aunque ya preparan su retorno al recinto.
La explosión ocurrió el 19 de abril en la sala de las bombas que impulsan el agua de dicho edificio ubicado en el sector Isla Teja de Valdivia, detectándose en primera instancia gas metano en el alcantarillado del recinto.
El 11 de mayo, tres semanas después del hecho, por instrucción de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, un empresa externa proporcionada por Lipigas realizó nuevas mediciones, las que determinaron que no había presencia de gas metano ni licuado en el alcantarillado del edificio, finalizando la labor de la SEC en este caso.
No obstante, las 43 personas evacuadas luego de la explosión, siguen sin volver al edificio por el temor que les ocasiona la situación, estando ahora realizando gestiones para preparar un retorno seguro al lugar.
Así lo expuso la presidenta del Comité de Emergencias del recinto, Ana Rivera, quien dijo que las mediciones de la empresa externa debieron realizarse a días de la explosión y no a casi un mes del hecho.
En esa línea, dijo que siguen con la incerteza de no conocer el origen de la explosión, esperando tener más claridad con la información que proporcionen los diferentes organismos involucrados a través del recurso de protección que presentaron.
En tanto, desde la Onemi se informó que este jueves habría novedades sobre el posible retorno de los habitantes del edificio.