La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) de Los Ríos exigió a la empresa Celulosa Arauco el reporte de emisiones y de calidad de agua, tras los efectos ambientales en el luchecillo en el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter.
El superintendente de Medio Ambiente, Francisco de la Maza, confirmó que recibió una denuncia de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) que reporta efectos ambientales en el luchecillo, planta acuática que es el alimento de los cisnes de cuello negro en el humedal del Río Cruces, sitio Ramsar y Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter.
La autoridad indicó que requirieron que la Planta Valdivia de la empresa, intensificara sus monitoreos de emisiones y de calidad de agua, exigiendo distintos reportes.
El superintendente dijo que con esto esperan tener una vigilancia mucho mayor de lo que está ocurriendo en el río, asegurando que como organismo están alertas a la situación, esperando que no existan efectos ambientales que pongan en riesgo el patrimonio ambiental del país.
Por otro lado, según el último reporte del Centro de Humedales Río Cruces, hay ausencia de luchecillo en unos 80 km de ribera, y en otros 42 km su aspecto es color ocre con alta carga de sedimentos ramoneados por cisnes.
En 29 kilómetros se evidencia deterioro en que la planta acuática presenta un color pardusco oscuro o negro y que emerge a escasos centímetros de la superficie, mientras que el luchecillo que presenta un aspecto saludable ocupa unos 26 km de ribera en el santuario.
Cabe señalar que los grupos de científicos han observado que no hay evidencia de muertes de cisnes por causas distintas a ataques de otras especies y muerte natural.