Tras una denuncia presentada en 2017 por corte no autorizado, el Juzgado de Policía Local de Castro ordenó sancionar a la Comunidad Indígena Coihuín de Compu y a la empresa forestal asiática Golden Spring, por tala indiscriminada de bosque nativo en una superficie de 1.058 hectáreas en el sector Yerba Loza en Chonchi y Tepuhueico en Quellón.
Esta explotación se habría llevado a cabo por más de 20 años. Y en el detalle, la acusación destacaba que en las noches, después de las 23:00 horas, los fines de semana, camiones transportaban trozos de madera hasta dos aserraderos en Pulpito y Compu.
En total, la comunidad habría autorizado la extracción de 249 mil metros cúbicos de madera nativa, solo entre 2014 y 2018, valorada en 3.741 millones de pesos. De igual manera, se ubicó una extensa red caminera que habría sido realizada por maquinaria pesada para las circulaciones de camiones.
Por estos hechos, la multa ascendió a los 22.450.650.000 pesos que van a beneficio municipal, y además, deberán reforestar el lugar mediante un plan de manejo.
La destrucción del bosque se efectuó en un predio de la empresa Golden Spring, que tenía abandonado desde la década del 90, el que dejó que la comunidad indígena en cuestión ocupara pacíficamente mientras se llevaba a cabo el proceso de venta de ese terreno ante la Conadi.
La valoración de Conaf
En tanto, el director regional de Conaf, Miguel Leiva, valoró la investigación y posterior multa.
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Además, Leiva dijo que ya están en diálogos con la comunidad indígena para poder colaborar en la reforestación de la zona intervenida.
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La madera había sido extraída de zonas afectadas por incendios y talada desde bosque virgen. Esta situación develó que principalmente se vio afectado bosque adulto, con especies como canelo, coihue, tepu, mañio o luma, entre otros. Además de daños indirectos a cursos de agua y erosión del suelo. Los detalles fueron descritos por en un reportaje de BBCL Investiga.