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Vecinos del condominio Portal Bosquemar en Puerto Montt denuncian problemas de infraestructura y administración, así como humedad y hongos en los departamentos entregados hace un año, contactando al Serviu para informar sobre fallas estructurales. La construcción de 220 departamentos, algunos adquiridos con subsidio habitacional, presenta problemas de humedad, inundaciones y hundimiento de torres. Residentes culpan a la empresa Barceló por falta de mantenimiento, mientras que el Serviu asegura que se están realizando reparaciones antes de que termine la garantía. Además, los propietarios reportan cobros excesivos y dificultades para formar un comité administrativo vecinal.

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Problemas en infraestructura y en la administración, además de humedad, denuncian las cerca de 150 familias del condominio Portal Bosquemar de Puerto Montt, en la región de Los Lagos.

Los vecinos, cuyos departamentos se entregaron hace un año, contactaron al Serviu, desde donde enviaron un técnico para tomar notas de las fallas estructurales, principalmente humedad que ha generado hongos en las paredes y ventanas.

Es una construcción reciente que contempla alrededor de 220 departamentos, aunque no todos tienen propietarios. Algunos de los inmuebles fueron comprados con subsidio habitacional y otros con crédito hipotecario, y están avaluados en casi 95 millones de pesos.

Un vecino, que prefirió mantener en reserva su identidad, dijo que deben convivir con hongos y la humedad. Situación que se suma a las inundaciones cuando llueve y al presunto hundimiento de algunas torres.

Los residentes apuntaron contra la empresa administradora Barceló, acusándola de no cumplir con lo mínimo para mantener en buenas condiciones los edificios.

Serviu: empresa ha cumplido con reparaciones

Al respecto, la directora regional del Serviu, Isabel de la Vega, aseguró que la empresa está cumpliendo con las reparaciones. Explicó que antes de que termine la garantía se subsanen todas las observaciones o de lo contrario podrían pedir una extensión de la garantía.

A los problemas de infraestructura, se suman los problemas de administración, que según indican los mismos propietarios, realizan constantes cobros excesivos y les impiden conformar un comité administrativo vecinal.