Un total de 27 años tendrán que pasar para que el bypass de Castro se pueda concretar, pese al nivel de importancia que significa un proyecto de tal envergadura para los chilotes. Luego de tres procesos licitatorios, se espera que esté funcionamiento para 2026.
Castro es una de las pocas ciudades por las cuales pasa la Ruta 5, donde cada día circulan más de 300 camiones de gran tonelaje y de distintas industrias, sin contemplar el aumento de flujo de vehículos menores que deben atravesar las calles O’Higgins y San Martín, que cada vez más sufren los impactos y el deterioro.
Cronología del proyecto
Por esta razón fue que en 1999 surgió la necesidad de proyectar una solución que permitiera descongestionar esta transitada vía de la capital de Chiloé a través de un bypass.
El alcalde de esa época, Nelson Águila, y quien hoy se desempeña como consejero regional de Los Lagos, contó a Radio Bío Bío cómo nació esta anhelada iniciativa para los chilotes.
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Luego de 7 años, en 2006, el proyecto recibió su primer impulso. Ese año, la otrora presidenta Michelle Bachelet lo incorporó al Plan de Desarrollo Integral de Chiloé, junto a otras obras.
En ese entonces, la iniciativa contemplaba una extensión de 16,01 km entre Llau – Llao en Castro, y Alcaldeo de Rauco en Chonchi, sin embargo, debieron pasar otros 9 años para que el exministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, pusiera la primera piedra en 2015, lo cual fue anunciado con bombos y platillos.
Al respecto, el exministro Undurraga detalló que el primer contrato fue adjudicado a la empresa Besalco el 17 de agosto de 2015, por más de 24 mil millones de pesos.
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A un año de la ejecución de las obras se encontraron restos arqueológicos, lo que provocó la paralización de las faenas. A ello se sumaron otras contingencias, por lo que Vialidad puso término anticipado al contrato en septiembre de 2018, fecha en la que la construcción llevaba un 38% de avance, pese a que según el contrato ya debía estar en funcionamiento.
Pasado un año, en octubre de 2019, se realizó un nuevo llamado de licitación para concluir la obra, la cual fue adjudicada a la Constructora Claro Vicuña Valenzuela por un monto de más de 24 mil 500 millones de pesos. No obstante, en octubre de 2022, la empresa se declaró en quiebra, abandonando la obra que llevaba un 70% de avance.
En la actualidad han pasado 25 años desde que se gestó esta iniciativa, pese a que tenía una duración esperada de 3 años de ejecución. Pero, ¿Cuál es la situación actual? Tomando en consideración que es la tercera obra más importante del archipiélago, luego del Puente Chacao y la futura doble vía ¿Cuánto tiempo más se deberá esperar?
Una esperanza para el bypass de Castro
Pues bien, en noviembre de 2023 se adjudicó una nueva licitación a la empresa Sicomaq por un monto de 25 mil 166 millones de pesos, lo que consideró un importante aumento del presupuesto inicial.
Junto con ello, el pasado 19 de junio de 2024, autoridades de Gobierno anunciaron la toma de razón por parte de Contraloría al contrato para concluir las faenas del esperado bypass de Castro, que en esta tercera oportunidad cuenta con un plazo de ejecución de 720 días corridos, finalizando en octubre de 2026.
El vicepresidente de la Multigremial de Chiloé, y presidente de la Cámara de Comercio de Castro, Julio Candia, señaló que este es un proyecto emblemático para la ciudad, y que se ha retrasado demasiado.
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Similar parecer compartió el exjefe comunal Nelson Águila, ya que indicó que no es posible que un proyecto tan necesario, que promete dar solución a la congestión vehicular en el centro de Chiloé, tenga que demorar más de 25 años.
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A pesar de todas estas dificultades y burocracia, los chilotes han tenido la paciencia suficiente para aguantar todos estos inconvenientes, esperando que este último proceso pueda finalizar y que deje de ser un verdadero dolor de cabeza pasar por Castro, ya sea para residentes, como para visitantes.
Lo narrado es parte de la postergación que han tenido por años los chilotes, de la mano del poco interés de las autoridades de los 6 gobiernos que han pasado y un evidente abandono del Estado a las zonas más apartadas del país. Considerando que en el archipiélago existe poca población, lo que equivale a una baja rentabilidad social, como pasa con el proyecto del puente sobre el canal de Dalcahue y un sinfín de otras obras que siguen estancadas.
Ahora solo resta seguir esperando que esta vez se concrete y que en octubre de 2026, los conductores puedan utilizar esta vía alternativa después de 27 años.