El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en la región de los Lagos, publicó los indicadores coyunturales que confirman una caída en la recepción de la leche y, por contra parte, un alza en el remate de ganado.
Los productores lecheros de la provincia de Osorno, afirman que ello responde a los efectos climáticos y la necesidad de “hacer caja” por el difícil momento que enfrenta este sector económico.
El último reporte del INE refleja que, hasta octubre, la recepción láctea cayó en un 6,7% anual, y en contra parte, el ganado bovino rematado creció en un 2,2%, lo que en cifras representa 25.459 cabezas.
La gerente de la Asociación de Productores de Leche de Osorno, Anita Jans, explicó que el impacto en pradera especialmente por las lluvias es directamente proporcional en materia de rendimiento a la hora de las entregas lácteas.
“Un tema climático fuertemente. Las lluvias han sido importantes y eso atrasó muchísimo las labores. La siembra del maíz, el crecimiento de la pradera, la curva de producción va en línea con la producción de pasto. Eso estuvo muy retrasado”, aseveró.
Por ello, agregó que “ha sido un año difícil para los productores y probablemente lo va a seguir siendo. Los costos de producción están bastante elevados, y hay bastante incertidumbre también respecto del precio de la leche para el productor”.
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Además, indicó que el alza del remate del ganado bovino no es más que el reflejo de la necesidad de hacer caja y alivianar la carga que hoy enfrentan los productores.
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La gerente de la Asociación de Productores de Leche de Osorno dijo que, en función del descenso que expone el sector, se prevé cerrar el año con una caída de un 6% en contraste al 2022, en una región que aporta el 43% de la leche que se consume en el país.