Tras 7 meses de intensa búsqueda, familiares de un hombre de 50 años que escapó desde el Hospital San José de Osorno fueron informados de la certeza de identidad de restos óseos encontrados en junio pasado.
Se trata de Rubén Carlos Catalán Burgos, quien padecía Alzheimer y estaba internado desde el 11 de marzo de este año en el recinto médico, desde donde huyó.
Desde el hospital de la región de Los Lagos se explicó que Catalán Burgos evolucionaba a un tratamiento, y repentinamente escapó mientras un enfermero evaluaba a otro paciente.
En medio de rastreos, la familia fue informada -a mediados de junio- del hallazgo de un cuerpo en el sector de Ovejería. Así lo confirmó a Radio Bío Bío el sobrino de la víctima, Jorge Catalán.
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Una vez el cuerpo en el Servicio Médico Legal (SML), se determinó su traslado a las dependencias de la institución en Concepción para cotejar ADN y establecer la identidad.
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El argumento entregado a la familia para dilatar la entrega del cuerpo de Rubén Carlos Catalán Burgos, responde a pericias que establezcan la causa de su muerte.
Explicación que, dicen, entienden pero que suma mayor congoja considerando la larga espera y la incertidumbre de realizar sus exequias que incluyan su velatorio a causa de las condiciones de sus restos.