La Municipalidad de Ancud, región de Los Lagos, asumirá la reposición de las dos cureñas o bases de madera destruidas tanto por el paso del tiempo como por los actos de vandalismo que afectaron al Fuerte San Antonio.

Esta decisión fue adoptada por la Mesa de Patrimonio municipal, luego de los últimos destrozos y rallados con pintura que afectaron los cañones y accesos a este recinto.

A su vez, el encargado de la Oficina Municipal de Turismo, Nicolás Olave, dio a conocer en qué van a consistir los trabajos.

En ese sentido, Olave recordó que el Fuerte San Antonio tiene la categoría de sitio arqueológico por ley.

Debido a lo anterior, el municipio no puede intervenir en la conservación de los siete caños que forman parte de este histórico espacio.