Una niña de 12 años de Chaitén pudo cumplir uno de sus sueños tras morir. Esto, porque su familia cumplió su voluntad de donar sus órganos para darle una nueva oportunidad a quienes hoy esperan esta posibilidad.
Se trata de Francisca Barrientos, niña de Chaitén de solo 12 años de edad, que murió debido a un derrame cerebral y que es recordada por su familia como una persona muy bondadosa y que antes de llegar a la vivienda donde vivió el último tiempo, residió en la Villa Santa Lucía antes del aluvión de 2017.
Su madre, Deyanira, contó que pese a su corta edad, en varias oportunidades le manifestó su deseo de ser donante.
La mamá agregó que de esta forma están honrando a su hija y brindando alegría a una familia.
El procuramiento de órganos se realizó en el Hospital de Puerto Montt y según se informó serán recibidos por personas en lista de espera en Santiago y Chillán.