La idea de una corte de apelaciones para Osorno continúa latente, ante la doble dependencia en el Poder Judicial que tienen los tribunales locales.
Jueces y personeros vinculados reconocen las dificultades, a la espera de los resultados de los estudios que definirán las prioridades nacionales en la materia.
Recientemente, la Corte de Apelaciones de Valdivia dio su primera cuenta pública fuera de la región de Los Ríos. Lo hizo precisamente en Osorno, como una señal de descentralización y de una vinculación mayor con los tribunales de la provincia, siendo la Universidad de Los Lagos el lugar elegido para la cuenta anual, que este año comienza a impartir la carrera de Derecho en la zona.
En la actividad el nuevo presidente del tribunal de alzada, Samuel Muñoz Weis, destacó la importancia de la plaza Osorno para la corte, aún cuando reconoció que la doble dependencia jurídico-administrativa puede generar complicaciones a los tribunales locales.
El establecimiento de una corte de apelaciones para Osorno es para muchos la solución a la doble militancia que señala Muñoz.
Su predecesor, Carlos Gutiérrez, tras traspasar el cargo de presidente de la Corte de Apelaciones en Valdivia, reconoció que mejorar el servicio tiene directa relación con la cercanía de los tribunales al territorio donde nacen las causas a tramitar.
Para el juez Muñoz, dichas dificultades no alcanzan a ser un problema. Sin embargo, se solucionan con una mayor vinculación entre las entidades de las cuales dependen los tribunales de la provincia de Osorno.
Pero la demanda de una corte de apelaciones para Osorno está instalada desde hace años, sobre todo en el mundo político. De hecho, ha sido incluso planteada en el Parlamento y el actual seremi de justicia en Los Lagos, Alex Meeder, manifestó dicha necesidad al ministro Hernán Larraín.
Según explicó, los resultados se esperan en el mediano plazo, pues la cartera de Justicia busca priorizar las zonas que necesitan un tribunal del alzada, entre las que se encuentra la provincia.
En la cuenta pública de la Corte de Apelaciones de Valdivia, además de oficializarse la entrada del nuevo presidente, también juraron dos abogados de Osorno como magistrados, Mauricio Fehrmann Miranda y Luis Felipe Galdames Bühler.