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En lo que va de este año, un total de cinco operativos antidrogas han sido desarrollados por el Ministerio Público de La Araucanía. Esto, principalmente en comunidades de la provincia de Malleco, incautando cerca de dos mil plantas de marihuana.

El fiscal regional de La Araucanía sostuvo que, en la mayoría de las ocasiones, se trata de organizaciones que utilizan la bandera de lucha de reivindicación territorial como fachada para cometer delitos.

El último de los cinco operativos se realizó el martes pasado por la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) de la PDI en la comunidad Chequenco Alto en la comuna de Ercilla, donde fueron incautadas 720 plantas de marihuana y 15 kilos de la droga a granel, además de munición de guerra.

En estos casi tres meses el Ministerio Público ha realizado operativos con apoyo de la PDI, Control de Orden Público de Carabinero y en algunos casos del Ejército, ingresando a sectores como comunidad Lolocos, donde se incautaron 156 plantas, Pancho Curamil donde se decomisaron 470 plantas, más munición de guerra y Chacaico, donde fueron halladas 200 plantas.

El seis de marzo, el personal del OS-7 de Carabineros ingresó a un predio de Los Sauces, que era usurpado por una comunidad mapuche que adhiere a la Resistencia Mapuche Malleco (WAM), donde se incautaron 50 plantas de marihuana.

El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, en referencia a este operativo, entregó un análisis más general de este fenómeno delictual que ha generado diversos operativos.

El delegado Presidencial Regional, Eduardo Abdala, se refirió a estos operativos en la provincia de Malleco.

En su mayoría se trata de invernaderos ubicados en sectores de difícil acceso y qué son levantados por miembros del crimen organizado que buscan control territorial, así lo manifestó el ex delegado presidencial regional de La Araucanía, José Montalva.

La convicción del Ministerio Público es que algunas organizaciones que adhieren a una postura más radical frente al conflicto en la zona sur, han optado por el cultivo y la venta de droga en sectores rurales, tomando la reivindicación territorial solo como fachada.