La suspensión de su licencia de conducir, la firma cada dos meses ante Carabineros y el pago de 50 mil pesos en beneficio de Bomberos, deberá cumplir el alcalde de Loncoche, Alexis Pineda, sorprendido manejando ebrio un vehículo fiscal.
La autoridad, quien además enfrenta un proceso administrativo de Contraloría que podría destituirlo del cargo, asumió el error y ofreció disculpas.
Esto luego de acordar una salida alternativa que fue planteada ante el Tribunal de Pitrufquén, tras la extensa investigación penal que mantuvo en calidad de imputado al jefe comunal de Loncoche.
La autoridad local fue detenida por Carabineros, en abril del año pasado, cuando se mantenía junto a una mujer al interior de un vehículo fiscal, en medio de la ruta hacia Gorbea, con el motor encendido y las luces apagadas.
De acuerdo a los datos de la investigación, al ser fiscalizado, Pineda no descendió del móvil y aceleró, casi estrellándose contra la patrulla. Posteriormente, tampoco quiso practicarse la alcoholemia.
La suspensión condicional del procedimiento implica la suspensión de su licencia por dos años a partir del 2022, la firma cada dos meses en Carabineros y el pago de 50 mil pesos en favor de Bomberos.
La Radio conversó con el alcalde Pineda, quien arrepentido admitió el error y ofreció disculpas nuevamente a la ciudadanía.
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Lo cierto, es que si bien, por ahora, el proceso penal que involucra al alcalde fue suspendida, paralelamente sigue en curso una investigación de Contraloría, que podría terminar en la destitución del cargo.