A 15 años de presidio fue sentenciado un hombre acusado de abuso sexual y violación infantil en la comuna de Angol, en la región de La Araucanía.
La víctima fue la hija de su cónyuge, quien tenía nueve años cuando ocurrieron los delitos.
Estos hechos iniciaron en 2017 y se repitieron hasta mediados de 2020. Fue en junio de ese año que la abuela de la niña denunció al imputado, luego de sorprenderlo mientras le realizaba tocaciones a la menor. Esto dejó al descubierto la serie de abusos que venía cometiendo.
El fiscal jefe de Angol, Cristián Gacitúa, explicó que los delitos ocurrieron en el domicilio común, la mayoría de las veces de noche, cuando su esposa dormía bajo el efecto de los medicamentos que debía tomar.
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Así se obtuvo la pena de 15 años de presidio para el condenado, tras un juicio que contó con la declaración de la menor, que actualmente tiene 13 años.
La sentencia deberá cumplirse de forma efectiva, ya que no hay derechos a penas sustitutivas. A esto, se sumó la prohibición de acercarse a la menor por el tiempo que dure la condena.