El intendente de La Araucanía, Víctor Manoli, condenó la muerte del sargento Francisco Benavides García, luego de que recibiera un disparo en el pecho la tarde de este lunes en Collipulli.
La autoridad indicó que “la región nuevamente se encuentra de luto” y afirmó que el funcionario fue atacado “por asesinos terroristas, que los emboscaron”.
De igual forma, Manoli, desde el hospital de la comuna, envió sus condolencias a la viuda del sargento y a sus tres hijos, quienes, al igual que Benavides, son oriundos de Quillón, y debido al hecho serán trasladados a Temuco.
“Esto no lo podemos seguir permitiendo, acciones de esta naturaleza no son un problema de este Gobierno, ni de las autoridades, es un problema de Estado. En la medida en que entendamos y condenemos estos hechos vamos a saber y poder derrotar esta violencia que tanto nos aqueja en La Araucanía, y que además sólo pedimos paz y poder trabajar”, señaló.
El intendente entregó más antecedentes sobre la situación, señalando que el sargento Benavides junto a otros funcionarios acudieron la mañana de este lunes a las rutas 49 y R-45 por al menos diez cortes en ellas. En eso, “cuando ya habían terminado, alrededor de las 16:00 de la tarde, con el procedimiento casi terminado, emboscan a quienes ya venían saliendo”.
De acuerdo a Manoli, el vehículo en el que se trasladaban era blindado.
El general Carlos González, jefe de zona del Control de Orden Público, afirmó que como institución sienten “una profunda impotencia, rabia, después de 7 meses de haber enterrado al suboficial mayor Naín, nuevamente nos encontramos siendo atacados violentamente con armamento de guerra por delincuentes en el sector de Collipulli”.
“Pedimos que todo el mundo condene enérgicamente la muerte de un carabinero”, afirmó e indicó que no se debe relativizar la muerte de los funcionarios.
Enfatizó en que “hoy día hay una familia que no tiene un padre, una familia destruida, una institución que está llorando, pero seguimos en pie y no vamos a descansar hasta detener a estos delincuentes”.
A la altura del kilómetro 10 de la ruta R-45, según detalló el general, el grupo de carabineros fue atacado desde un bosque.
De acuerdo González, un disparo alcanzó el costado del sargento Benavides, zona que no estaría protegida por el chaleco antibalas.
“El venía sobre la estructura del vehículo blindado, se llama manejar fuera de periscopio”, precisó.