A los 91 años, falleció la tarde de este sábado el obispo emérito de Temuco, Sergio Contreras Navia, recordado por su servicio a los pobres y la lucha por los derechos humanos.
Su deceso se produjo en el Hogar de Ancianos Nuestra Señora del Carmen, recinto que lo albergó desde 2009 y donde permaneció aquejado de diversas enfermedades bajo el cuidado de las religiosas del lugar.
Contreras fue el sexto obispo de la capital de La Araucanía, dirigiendo por 23 años la Diócesis San José, la cual asumió el 15 de enero de 1978 y que dejó el 3 de noviembre de 2001, y que lideró bajo el lema “no he venido a ser servido, sino a servir”.
Durante su gestión, destacó su preocupación por los derechos humanos, manteniendo un comité de solidaridad durante la dictadura, ayudando a reconstruir -además- la Catedral destruida por el terremoto de de 1960.
A través de su página web, la Conferencia Episcopal de Chile se refirió a la figura del fallecido obispo emérito, destacando su cercanía con los pueblos originarios, sumado a sus esfuerzos por la justicia y paz en La Araucanía.
En ese sentido, Contreras Navia cumplió funciones como obispo de Ancud, además de ser presidente de Caritas Chile entre 2003 y 2006.
Asimismo, el estamento destacó que “fue él quien impulsó el apostolado de los laicos y la promoción humana y cristiana de los más desposeídos”.
El velatorio de Sergio Contreras Navia se desarrolla desde la tarde de esta jornada en la Catedral de Temuco, recinto donde se oficiará una misa en su memoria.