Pese a esta con arresto domiciliario por atacar a siete mujeres de La Serena, el llamado “acosador de El Milagro” volvió a actuar contra dos nuevas víctimas en el sector de Peñuelas, en Coquimbo, las que ahora buscan que el acusado vaya a prisión y no se vuelvan a repetir estos hechos.

El caso llegó a juicio en el Tribunal Oral de La Serena, donde la Fiscalía, querellantes y la defensa expusieron sus alegatos de apertura, dando paso a la presentación de pruebas y el testimonio de las afectadas.

Esto último será clave para conseguir una condena en la audiencia que se proyecta por tres días.

Eso sí, son conscientes de que el castigo por el delito de abuso sexual impropio es bajo.

Por lo mismo, las víctimas aspiran a que el tribunal dicte una sentencia de 5 años de presidio efectivo, el máximo contemplado en la ley.

Los delitos del “acosador de El Milagro”

En 2019, el hombre de entonces 32 años fue denunciado por una serie de abusos en La Serena.

Según los antecedentes del hecho, el sujeto se acercaba -en su auto o a pie- a mujeres que se encontraban solas en la vía pública del sector de El Milagro, en la capital regional.

De esta forma, las sorprendía y realizaba tocaciones, para luego huir rápidamente del lugar.

Las víctimas compartieron sus testimonios en un reportaje de El Día, publicado en agosto de ese año y el caso llegó posteriormente a la justicia.

Así, el individuo quedó en prisión preventiva por orden del Juzgado de Garantía de La Serena, medida que luego fue revocada y reemplazada por arresto domiciliario.

Luego, en mayo de 2020 y a través de un procedimiento abreviado, el hombre fue sentenciado a una pena de 541 días por ataques a un total de 7 víctimas, sanción que debía cumplir también con reclusión en su vivienda.

Los ataques en Coquimbo

Sin embargo, estando aún bajo la figura de arresto domiciliario, faltó a la determinación del tribunal y comenzó nuevamente a perpetrar el mismo tipo de ilícitos, esta vez en Coquimbo.

Es así como el 15 de septiembre de 2020 sumó a dos nuevas víctimas, con solo minutos de diferencia.

En esta oportunidad, el sujeto rondó en su automóvil -un Toyota Yaris color rojo, a una mujer cerca de las 14:50 horas.

Una vez que esta se encontraba en un lugar desprotegido, donde nadie pudiera auxiliarla, se bajó del vehículo y la atacó de la misma forma en que lo hizo en La Serena con las otras víctimas.

Luego, a eso de las 15:30 horas, hizo lo mismo con otra mujer.

Al respecto, la defensa del imputado propuso llegar a un acuerdo que le asegurara solamente 3 años de cumplimiento efectivo de la pena, que además, bajaría a la mitad si se consideraba el año y medio que ya ha purgado.

No obstante, las víctimas se opusieron a este acuerdo.

“Por las características de serialidad y porque es un delito sexual, nosotros consideramos que es un peligro para la seguridad de la sociedad y especialmente para las mujeres”, comentó María José Duarte, abogada del Programa de Apoyo a Víctimas de la Subsecretaría de Prevención del Delito y jurista que tomó parte en la causa como querellante en representación de las dos mujeres de Peñuelas.

“Las víctimas quieren ir a juicio oral, con el fin de que se pudiera lograr el máximo de la pena que en este caso son cinco años. Las penas por abuso sexual por sorpresa son bajísimas”, lamentó.

Ataques quedaron registrados en cámaras de vigilancia

Tras la audiencia, en la que declararon las dos mujeres, la fiscal Yocelyn Weisser, dio cuenta de los medios de prueba con los que se espera probar el delito.

“Contamos hoy día con el valioso testimonio de ambas víctimas, también contamos con imágenes del vehículo circulando por el sector de Peñuelas”, detalló.

“Respecto de uno de los dos hechos investigados, se encontró también un video, en el que una cámara de un domicilio capta el momento exacto de los hechos y el momento en que el imputado se acerca a una de estas víctimas”, indicó la persecutora.

Se espera que el juicio se prolongue hasta este viernes, por lo que ese día podría conocerse el veredicto del caso.

La abogada María José Duarte, comenta que lo sucedido en El Milagro, “es un antecedente que van a tener los magistrados a la vista a la hora de dictar sentencia”.

“Tienen que tener en cuenta que él incumplió la primera sentencia, también la reincidencia en el delito y que ya no tiene irreprochable conducta anterior”, destacó, por lo que esperan conseguir los cinco años de presidio, que aún así, consideran bajos.

Apoyo a las mujeres: evitar la revictimización

La abogada del Programa de Apoyo a Víctimas indicó que se trabaja con las mujeres afectadas por estos delitos a través de tres áreas: psicológica, jurídica y social.

En la primera, el objetivo es “evitar la revictimización y victimazación secundaria, es decir, que no vuelvan a revivir el delito y no tengan consecuencias ulteriores a lo que les sucedió”.

En este punto, María José Duarte ahonda en las consecuencias que genera a largo plazo el pasar por una situación de este tipo.

“A pesar de que ha pasado tiempo, el delito es violento, es grave. Es un ataque cobarde y repudiable por donde se le mire. No es tan fácil recuperarse anímicamente o psicológicamente. Para una como mujer es imposible no empatizar con las víctimas”, declaró.