Este lunes, además de estar imputada como presunta autora de parricidio, la madre de Melissa Chávez fue reformalizada como cómplice de Luis Santander en la violación y abusos a la víctima. El Ministerio Público expuso antecedentes de cómo la mujer “cooperó con el imputado”, permitiendo que este tuviera acceso a la niña pese a la denuncia realizada en 2014. Por lo anterior se extendió el plazo de investigación.
Este lunes se realizó la audiencia de reformalización de Mirta Ardiles, quien se encuentra en prisión preventiva desde febrero mientras se indaga su responsabilidad por los delitos de parricidio e incendio agravado en el contexto del caso de la muerte de Melissa Chávez.
Cabe recordar que la mujer habría asesinado a su propia hija con un arma cortante, para luego encender fuego a su vivienda en villa Talinay, en la comuna de Coquimbo.
En tanto, el 18 de noviembre pasado fue formalizado Luis Santander, pareja de Mirta y padrastro de Melissa, imputado por los delitos reiterados de violación y abuso sexual que el hombre habría cometido desde el año 2014 contra la pequeña víctima.
En este contexto, la cita de ayer en el Juzgado de Garantía de la comuna puerto tenía por finalidad presentar los antecedentes por los cuales se investiga a la madre de la niña como cómplice de estos últimos delitos.
Nuevos antecedentes y duras revelaciones
A casi un año de cumplirse la muerte de Melissa Chávez se han ido conociendo nuevos detalles del brutal crimen que remeció a la región de Coquimbo.
La audiencia de ayer evidenció la responsabilidad de Ardiles en todo lo que rodeó la vida de vulneración de la que fue víctima la menor.
De acuerdo a lo señalado por parte del Ministerio Público, al interior de un domicilio del sector de la Parte Alta de Coquimbo en 2014, cuando Luis Santander se encontraba al cuidado de Melissa -de 6 años en ese entonces- habría abusado sexualmente de ella.
Si bien esta situación fue denunciada por Mirta Ardiles, en la medida que estos hechos avanzaron desde el punto de vista investigativo, la madre de la pequeña habría decidido retractarse.
Otro hecho que fue destacado por parte del ente persecutor fue que durante 2020, Luis Santander retomó una relación sentimental con Ardiles. Por esto, la mujer se trasladó a vivir con el imputado a la vivienda de Villa Talinay, junto a Melissa Chávez y un hijo que tenían en común.
Sin embargo, de acuerdo a lo indicado por la Fiscalía, desde el momento que se instalaron en esa vivienda “y hasta el 26 de noviembre de 2020, el imputado efectuó actos de significación sexual reiterados a la víctima”.
Asimismo, describieron que Mirta Ardiles “cooperó con el imputado (…) en la ejecución de los hechos permitiendo que tuviera acceso a la víctima a sabiendas de la denuncia por abuso sexual realizada en 2014”.
Nuevos plazos
En la audiencia, el magistrado Roberto Gahona Rojas sostuvo que “el Ministerio Público reformalizó la investigación ampliando los hechos, los cuales atribuye participación en calidad de cómplice (a Mirta Ardiles)”.
Además, puntualizó detalles respecto de nuevos lapsos investigativos para Santander y Ardiles. “Ante la cercanía del vencimiento del plazo que se había decretado primigeniamente en relación con la señora (Ardiles), este fue ampliado hasta esa fecha -21 de diciembre de 2021”.
En definitiva, el juez mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva para la madre de Melissa Chávez y aumentó el plazo de investigación en 30 días, de manera que coincida con el término del plazo de Luis Santander, imputado en la misma causa.
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