
VER RESUMEN
Herramienta desarrollada por BioBioChile
La Subsecretaría de Energía firmó un contrato de $52 millones para el estudio sobre brechas de género y derechos humanos en el sector energético para el Ministerio de Energía, lo cual ha generado controversia en el Congreso. El diputado de la UDI, Marco Sulantay, ha solicitado detalles sobre la investigación, cuestionando su justificación y el uso de los recursos asignados, así como la partida presupuestaria involucrada en la iniciativa.
El pasado 2 de agosto de 2024, la Subsecretaría de Energía suscribió un contrato por $52 millones de pesos para realizar el estudio denominado “Identificación de brechas de género y enfoque de derechos humanos en el sector energético”. La iniciativa es ahora cuestionada en el Congreso.
En concreto, el diputado de la UDI, Marco Sulantay, ingresó un oficio para obtener detalles de la investigación, preguntando “en qué consiste” y qué justifica la necesidad de la misma. Además, pidió “la indicación de los recursos que se hayan destinado para tal propósito y la partida presupuestaria involucrada”.
Sus cuestionamientos -de momento- no han sido contestados. No obstante, BioBioChile accedió al contrato que justifica la inversión.
La explicación tras el estudio
En el documento que selló el trato entre la subsecretaría y la empresa “Servicios de Ingeniería Deuman”, se explicita que el estudio se enmarca en el “Programa de Gobierno Apruebo Dignidad 2022-2026” del Presidente Gabriel Boric.
Este definió “cuatro perspectivas transversales que persiguen la búsqueda de justicia social y desconcentración del poder, a saber: feminismo, transición ecológica justa, descentralización y trabajo decente“. En ese sentido, la labor feminista del Gobierno habría sido clave para concretar la investigación.
El escrito también menciona la “Política Energética Nacional 2050”, que busca -entre otros- incluir “de manera explícita a los grupos de personas que no han sido incorporadas plenamente, como las mujeres”, y la “Agenda de Energía 2022-2026”, que propone objetivos en la misma vía.
Así, aseguraron que el estudio “permitirá al Ministerio de Energía, sus Servicios Relacionados, y la industria, posibilitar el análisis de la situación actual de las brechas de género y otras materias de derechos humanos en el sector energético, y trabajar posteriormente en la priorización conjunta de nudos críticos para abordarlos con miras al año 2030, en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”.
No obstante ello, al ser consultados por este medio, desde el Ministerio de Energía recalcaron que el proyecto “se hace para un programa que viene desde el Gobierno del exPresidente Piñera”.
Una iniciativa desde Piñera II
Lo último se evidencia en al menos dos aspectos del contrato. Primero, se dice que el instrumento va a “actualizar las cifras obtenidas del primer diagnóstico realizado en 2018, y cuyo resultado evidenció que en el sector energético nacional sólo hay un 23% de participación de mujeres en la industria”.
En segundo lugar, se hace referencia a la denominada “Mesa Público-Privada de Energía y Género” (Energía + Mujeres), la que se constituyó en 2018, también bajo el Gobierno de Piñera, y que habría apoyado la realización del estudio.
Pese a esto, en conversación con BioBioChile, Sulantay dijo que el proyecto despertó dudas “en el marco del caso Fundaciones” y porque, a su juicio, “este Gobierno tiene graves problemas de priorización, donde se gastan millonarios recursos en programas como este que no tienen ninguna importancia”.
A este se sumó -recientemente- el diputado Juan Antonio Coloma, quien -vía X- publicó la orden de compra del estudio, emplazando: “Hagan un mea culpa y asuman responsabilidades”.
El Pdte Boric se muestra “indignado”, pero su gob licita un estudio de “identificación de brechas de género y enfoque de ddhh en el sector energético”
Hagan un mes culpa y asuman responsabilidades
Presentaremos sesión especial y comisión investigadora pic.twitter.com/2LGYiZnSxt— Coloma Diputado (@Tono_Coloma) February 26, 2025
Así las cosas, los $52 millones se gastaron, el proyecto se realizó, se publicó, y está disponible en la web.