Sin referirse a la fallida compra de la casa del expresidente Salvador Allende Gossens, pese a la presencia de la ministra Maya Fernández, este martes el presidente Gabriel Boric encabezó el hito de destrucción de armas decomisadas durante 2024.
En total, se trató de 24.402 elementos que contemplaban -entre otros- pistolas, revólveres, escopetas, rifles, armas artesanales, entre otros.
En la actividad, realizada en la comuna de Colina, también estuvo presente la ministra del Interior, Carolina Tohá; el general director de Carabineros, Marcelo Araya; el director general de Movilización Nacional del Ejército de Chile, Jorge Hinojosa; y el gerente general de Aceros AZA, Hermann von Mühlenbrock.
Destrucción de armas
Desde 1990, cuando se inició este proceso, se han destruido cerca de 224 mil armas. 67 mil de ellas fueron eliminadas durante este Gobierno, entre 2022 y 2024, lo que representa el 30% de las armas destruidas a la fecha.
La destrucción de armas es parte de la programación anual de la Comisión Nacional de Material de Guerra de las Fuerzas Armadas y Orden y Seguridad Pública. Dicha comisión está integrada por personal de las Fuerzas Armadas, Carabineros de Chile y la Policía de Investigaciones (PDI).
Una de sus tareas es proponer el destino final de las armas y otros elementos sujetos a control por la Ley 17.798 de Control de Armas. Las armas de fuego y otros elementos controlados incautados o cuyo poseedor se desconozca pasan al dominio fiscal y se procede a su destrucción.
También se consideran las armas entregadas voluntariamente. Las armas incautadas o entregadas de forma voluntaria son llevadas a una de las 64 Autoridades Fiscalizadoras de Chile, que remiten estos elementos a los depósitos.
Este año, con el acero generado tras la destrucción de las armas, se construirá una sala psicosocial, una iniciativa desarrollada por la agencia La Familia junto al Ministerio de Educación, el Ministerio de Defensa, Aceros AZA y la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Valparaíso.