En medio de la ceremonia de juramento de ministros de la Corte Suprema, el ministro de Justicia, Luis Cordero, se refirió a la situación de la ministra suspendida del máximo tribunal, Ángela Vivanco, como también al sistema de nombramiento.

Recordemos que Vivanco ha dicho que se ha sentido “maltratada” y que es “altamente probable que sea removida de la Corte Suprema”.

En este sentido, el secretario de Estado dijo que “tomaría las declaraciones de la ministra Vivanco como parte de su legítimo ejercicio a su derecho a defensa. Hay argumentaciones que sus abogados han esgrimido, tanto en el cuaderno de remoción como en la acusación constitucional. Ella ha expresado su opinión en diversas entrevistas a la prensa”.

Recalcando que “el Ejecutivo, lo que ha dicho desde el inicio, es que tanto respecto del cuaderno de remoción, como las acusaciones constitucionales contra ella y dos ministros más, el Ejecutivo se mantiene atento como observador”.

“Este es un problema, primero, del Poder Judicial y su mecanismo de autocontrol; y en segundo lugar, de la Cámara de Diputados como mecanismo de control mediante acusaciones constitucionales”, añadió Cordero.

Sistema de nombramiento

“Al Ejecutivo le corresponde estar atento a lo que ahí se debata, estándares que ahí se establezcan y, por cierto, a los elementos que tiene que tener en consideración para su proyecto de reforma al sistema de nombramiento”, sostuvo el ministro.

En esta línea, Cordero explicó que el presidente Gabriel Boric ha solicitado que el proyecto al sistema de nombramiento sea ingresado la semana del 15 de octubre.

“Yo lo expuse explícitamente durante la discusión de las propuestas de nombramiento de las ministras González, de la ministra López y del fiscal Pizarro. El Ejecutivo tiene una iniciativa de reformas que considera que el problema no solo tiene que ser observado desde el proceso de designación de ministros de Corte Suprema, sino que en particular lo que sucede de ministros de Corte de Apelaciones o la estructura más abajo”, indicó el secretario de Estado.

Remarcando que “ese ha sido el foco, es decir, no quedarnos exclusivamente con el debate contingente, sino que en general mirar toda la estructura del mecanismo de nombramiento, que en Chile esa es la opinión que tiene el Ejecutivo. Tiende a evaluar la antigüedad y el contacto personal, más que el mérito… porque no existen mecanismos de oposición, una vez que ya se ingresan al interior de la carrera. Y esos son los aspectos que el Ejecutivo está trabajando en la actualidad”.