El rector de la Universidad de Santiago de Chile, Rodrigo Vidal, abordó la polémica por el millonario sueldo que recibía Marcela Cubillos en la Universidad San Sebastián. Al respecto, aseguró que la exministra de Educación ganaba cerca de cuatro veces lo que gana un profesor titular en una universidad estatal.
En conversación con CNN Chile, el académico comentó el cuestionado sueldo de Cubillos, sobre cual señaló “tenemos que enfocar bien el problema que hay detrás. Hoy día el problema está enfocado en una persona y una institución, pero es más grande que eso”.
“La situación arranca en 1981, al menos, cuando se establece que las universidades deben autofinanciarse y el financiamiento se establece sobre base arancelaria, lo que los alumnos pagan. Este autofinanciamiento hace que haya una competencia”, explicó.
“Existe una exagerada regulación en todas las universidades estatales y una muy baja regulación respecto de las privadas. En las estatales, cuando alguien quiere ser rector, decano, director, académico, él sabe exactamente cuánto va a ganar (…) En el caso de las universidades privadas, eso no existe”, agregó.
En ese sentido, aludió a que la remuneración de 17 millones de Cubillos, es en parte, resultado de que en “43 años no hemos regulado la actividad universitaria en las empresas privadas”.
“Este problema es mucho más amplio y tiene que ver con el modelo económico, social, regulatorio que tenemos en Chile”, sentenció.
Comparación de sueldos
Con esto, el rector de la Usach reveló las distancias entre los sueldos de académicos estatales, y el recibido por la ahora candidata a alcaldesa de Las Condes.
En detalle, indicó que un profesor titular de una universidad estatal recibe un “sueldo bruto que está en torno al 25%-28% del sueldo de la señora Cubillos. O sea, $4 millones y medio bruto, más o menos”.
“Detrás de ese sueldo hay título profesional, licenciatura, magíster, doctorado, publicación, investigación, vinculación con el medio, gestión y 44 horas de trabajo obligatorias de lunes a viernes de 9:00 horas a 18:00 horas como mínimo”, advirtió Vidal, resaltando que hay “transparencia y probidad para unos y no transparencia y probidad para otros”.
Finalmente, en el citado medio, la autoridad académica emplazó al Estado a “establecer un modelo de financiamiento del sistema de la educación superior que haga esta distinción (entre instituciones pública y privadas) y que marque las regulaciones correspondientes”.
“Cuando el 45% del financiamiento de una universidad privada viene del Estado, yo como Estado necesito saber (que se hace con ese dinero) y eso hoy día no lo sé. Ese es el problema”, concluyó.