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La Fuerza Aérea de Chile (FACh) reveló los resultados sobre el tráfico aéreo no identificado detectado en el Estrecho de Magallanes el pasado 27 de agosto, situación que generó el despegue de aeronaves para su identificación. La aeronave no pudo ser confirmada y desapareció de los radares. Tras agotar esfuerzos de identificación, se despacharon más aeronaves para reconocer la zona. La FACh destacó que todo ocurrió en condiciones nocturnas sin limitaciones meteorológicas, sin embargo, no se pudo confirmar una violación del espacio aéreo chileno. Fueron descartados los rumores iniciales de una posible incursión aérea desde Argentina.

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Este viernes, la Fuerza Aérea de Chile (FACh) dio a conocer el resultado de la investigación sobre la presunta incursión aérea no identificada en el Estrecho de Magallanes, registrada el pasado 27 de agosto.

A través de un comunicado, la FACh explicó que “el sistema de detección institucional de la IVa Brigada Aérea, reveló la presencia de un tráfico no identificado en espacio aéreo nacional“.

Esta situación, “luego de aplicarse los protocolos establecidos para determinar su procedencia y naturaleza”, generó “el despegue de una aeronave F-5E para realizar su identificación”.

“La respuesta del avión F-5E se efectuó dentro de los tiempos y estándares establecidos para tal efecto”, afirma la misiva.

Presunta incursión aérea en Magallanes: aeronave no pudo ser identificada

“No obstante, a pesar de que la detección fue realizada por sensores terrestres y aéreos simultáneamente, éste (avión) no pudo ser identificado, al desaparecer de la presentación de los radares”, detalla la FACh.

En ese contexto, “posteriormente y habiéndose agotados los esfuerzos de identificación, se dispuso el despegue de una aeronave DHC-6 y un helicóptero UH-412, con el propósito de realizar un reconocimiento del sector donde había desaparecido el contacto“.

Del mismo modo, la FACh aseguró que todo “ocurrió en condiciones nocturnas y la meteorología existente no limitaba las operaciones aéreas, ni propiciaba la ocurrencia de fenómenos meteorológicos especiales que pudiesen generar falsos contactos de radar”.

Por ello, la institución subraya que “existe la posibilidad que lo detectado sea una aeronave volando a baja altitud y velocidad”.

En ese sentido, es probable que su “trayectoria en parte haya pasado fuera de la cobertura radar, desconociendo la existencia de los sistemas de detección Institucionales, aterrizando finalmente en un sector indeterminado, lo que explicaría la desaparición del contacto de radar terrestre y aéreo”.

De esta manera, con la investigación realizada, la FACh establece y sostiene que “existió (una) detección confirmada de tráfico desconocido”.

Asimismo, precisan que “todo se generó y desarrolló dentro del territorio nacional, por lo cual no se puede afirmar que haya ocurrido una violación del espacio aéreo de Chile“.

Cabe recordar que, al momento de ser reportada la presunta incursión, los rumores apuntaban a una supuesta violación del espacio aéreo chileno por parte de Argentina, lo cual fue descartado por las autoridades trasandinas.