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El representante para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jab Jarab, mostró su apoyo al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) en una carta dirigida a su directora, Consuelo Contreras, ante los ataques y cuestionamientos que enfrenta el organismo. Esto tras la solicitud de remoción de dos consejeros del INDH, Consuelo Contreras y Francisco Ugás, aprobada por la Cámara de Diputadas y Diputados, debido a una querella por tráfico de influencias presentada por el consejo del INDH. Además, el exministro de Defensa, Mario Desbordes, interpuso una querella por prevaricación contra seis consejeros del INDH. El representante del Alto Comisionado expresó su preocupación por la querella selectiva y destacó la importancia de las instituciones nacionales de derechos humanos en la promoción y protección de los derechos de todas las personas. Jarab también sugirió elevar las preocupaciones ante instancias internacionales.

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El representante para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jab Jarab, envió una carta a la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Consuelo Contreras, en que le manifiesta su apoyo ante la arremetida que enfrenta el organismo.

“Los ataques y cuestionamientos que se han dirigido hacia el INDH (…) son fuente de profunda preocupación para la Oficina a mi cargo”, manifestó el diplomático.

La misiva del representante del Alto Comisionado se conoce un día después de que la Cámara de Diputadas y Diputados aprobara solicitar a la Corte Suprema la remoción de dos consejeros del INDH. Ellos son la directora y el abogado de derechos humanos, Francisco Ugás.

Esto, ya que el consejo del INDH resolvió, en el ejercicio de sus funciones, interponer una querella por el delito de tráfico de influencias.

Todo surgió tras revelarse una serie de chats que contenía el celular del exministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Juan Antonio Poblete, quien se encuentra actualmente en prisión preventiva por la denominada “Operación Topógrafo”.

Carta al INDH

Además de la solicitud de remoción que deberá resolver la Corte Suprema, el exministro de Defensa, Mario Desbordes, interpuso una querella por prevaricación contra seis consejeros del INDH.

Esta acción penal, actualmente en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, se debe a la querella por tráfico de influencias, en la que también el mismo exministro de Defensa solicitó declarar su inadmisibilidad. Esta última petición la verá ahora la Corte de Apelaciones.

El representante del Alto Comisionado señaló en su carta que “las críticas hacia el INDH (…) parecerían desconocer los principios fundamentales que rigen a las instituciones nacionales de derechos humanos. Estas instituciones tienen un rol esencial en la vigencia del Estado democrático de derecho, sobre todo respecto de su función de promoción y protección de los derechos de todas las personas en condiciones de igualdad y no discriminación”.

Querella selectiva

Además, señaló su “preocupación” porque “la querella se presentó en contra de algunas de las personas que integran el Consejo del INDH por el delito de prevaricación administrativa. Me preocupa especialmente el uso de una herramienta penal y su ejercicio nominativo solo en contra de algunos miembros del Consejo. El Consejo es un cuerpo colegiado que adopta sus decisiones conforme a procedimientos previamente establecidos”.

Jarab dijo que “los derechos humanos, contenidos en los Pactos y las Convenciones Internacionales de DD.HH., ratificados por los Estados (entre ellos, Chile) no representan una opción o postura particular, sino la base común del desarrollo de cualquier Estado democrático de derecho”.

Añadiendo que los DDHH “representan un consenso universal sobre mínimos de convivencia que, al menos hasta la fecha, no han sido reemplazados por otros y se encuentran vigentes”.

En tanto, Jarab sugiere “respetuosamente que la institución eleve estas preocupaciones, si aún no lo ha hecho, ante la Alianza Global de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos (GANHRI), ante la Red de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos del Continente Americano (RINDHCA), así como ante la Relatoría Especial de las Naciones Unidas para la situación de las personas defensoras de los derechos humanos”.