La ministra de Salud, Ximena Aguilera, defendió a su cartera por el manejo sobre la denominada “bacteria asesina”, indicando que la alerta nacional “se gatilla cuando ya hay un incidente”, en medio de la polémica por la advertencia que hizo el año pasado la OPS.
Durante una visita inspectiva a las obras del Hospital del Salvador y el Instituto Nacional de Geriatría, la secretaria de Estado aseveró que se gestionó la alerta de manera oportuna, apuntando a que “la ambición de que uno controle a las bacterias es un poquito extrema”.
Lo anterior, en medio de los cuestionamientos luego que se diera a conocer que el Ministerio de Salud recién alertó sobre la presencia del streptococcus pyogenes, la denominada “bacteria asesina”, el pasado 27 de mayo.
Esto, pese a que la OPS levantó una primera advertencia el 28 de noviembre de 2023, según documentos a los que accedió Radio Bío Bío.
“La verdad es que la alerta de la Organización Panamericana de la Salud fue una alerta pública que se realizó a fin de año. Nosotros, por cierto que tuvimos conocimiento de ello, es un fenómeno que ha venido ocurriendo en distintas partes del mundo”, explicó Aguilera.
En ese sentido, sostuvo que “la alerta respecto al tema de la bacteria, se entrega hacia la red en el momento que se detectan casos graves en la comunidad”.
“Yo misma fui jefa de la unidad de la Organización Panamericana de la Salud en Washington, que hizo esa alerta. Estas alertas se hacen continuamente y son públicas, por lo tanto, ya se estaba en conocimiento de esa alerta y es difundida a través de los medios de comunicación que tiene la Organización Panamericana de la Salud y son abiertas a la red”, añadió.
En ese sentido, detalló que “cuando en Chile detectamos de que empieza a haber la presencia esta bacteria en la comunidad, hay que elevar ese nivel de alerta. Eso es lo que se hizo y se hizo cuando se detecta esta situación y yo creo que ha sido importante”, refrendó la ministra Aguilera.
De hecho, la ministra Aguilera insistió en que pidieron hacer público que los casos de los fallecidos en la región del Ñuble tenían relación con la bacteria asesina, pese al “ruido comunicacional” y la resistencia de otras autoridades.
“No me gusta que se le ponga apelativos a la bacteria, pero nosotros mismos insistimos que se hicieran comunicados respecto al tema de fallecimiento y agradecemos a los hospitales que han sido afectados, porque eso ayuda a que el personal sanitario que es nuestro interés que el personal sanitario, esté en alerta de que esto está ocurriendo y den atención en forma oportuna”, dijo.
Esto último, “más allá de toda esta situación que genera un ruido comunicacional, que puede ser que algunas autoridades no les gusta, pero aquí tiene un sentido muy claro y concreto y sanitario y es que el personal de salud estén alertas”.