El migrante de origen venezolano, muerto en balacera donde fue abatido el teniente de Carabineros Emanuel Sánchez, tenía orden de expulsión desde 2020.
Se trata de Julio Cesar González Vargas, quien ingresó a Chile el 16 de septiembre de 2020 a través de un paso no habilitado en la provincia de Tamarugal, de la región de Tarapacá, en la zona limítrofe con Bolivia.
Hecho que fue denunciado ante el Ministerio Público el 6 de octubre, lo que dio inicio al proceso de expulsión contra Julio González.
El mismo día, la Intendencia de Tarapacá ordenó a la Policía de Investigaciones que proceda a la expulsión “del territorio nacional al extranjero Julio César González”.
En la resolución administrativa a la que tuvo acceso Bío Bío Chile, se precisa que la expulsión se debía realizar “siempre que no existan causas pendientes” en contra del migrante venezolano, y que si las hubiera, se ejecute la orden tras el cumplimiento correspondiente.
No obstante, la expulsión ordenada no se habría realizado, considerando que Julio César González fue uno de los cinco individuos involucrados en el asalto y posterior enfrentamiento por una presunta encerrona, en Quinta Normal.
Según información recopilada hasta ahora, el teniente Emanuel Sánchez Soto, de 27 años, fue asesinado de cuatro disparos, luego de intervenir en el mencionado asalto.
El funcionario policial observó esta situación cuando volvía de un retiro religioso acompañado de su esposa y su hijo de tres años y siete meses. Aunque no estaba de servicio, Sánchez intervino.
Tras escuchar que el teniente Sánchez se identifica como carabinero, estos delincuentes comienzan a disparar en su contra, lo que produce un enfrentamiento. El funcionario fue alcanzado por al menos cuatro disparos, los cuales le quitaron la vida de camino al hospital San Juan de Dios.
En este mismo intercambio de disparos, el funcionario policial logró abatir a Julio César González.