El ministro de Justicia, Luis Cordero, fue consultado este lunes sobre la situación de los cinco chilenos adoptados irregularmente en dictadura y que se reencontraron con sus familias biológicas.

La conmovedora situación se registró a las 7:00 horas del domingo, y fue protagonizada por compatriotas provenientes desde Nueva York, Estados Unidos.

“El Ejecutivo reconoce que el tema de las adopciones irregulares es una tragedia de este país que se viene sosteniendo desde la década de los 60 en adelante y hasta bien adentrados los 90″, precisó el secretario de Estado.

Así también señaló que “las adopciones irregulares fueron producto de regulaciones flexibles, personas inescrupulosas y esencialmente la gestión de un tráfico, en ocasiones de niños y niñas, que resulta inaceptable”.

Adopciones irregulares

“La data de esas adopciones irregulares bordean 40… 45 años en nuestro país. El Presidente de la República ha sido claro sobre este punto. El Presidente ha solicitado una evaluación para abordar este tema que tiene que ver con tres dimensiones. La primera es el derecho a conocer los orígenes por parte de las personas que han tenido adopciones irregulares; muchas de ellas se fueron del país, con registro nacional y fueron adoptadas en el extranjero. Otras se fueron con registro nacional, con un mecanismo de adopción irregular en el país. Y otras se fueron del país, sencillamente con desconocimiento completo”, detalló Cordero.

“El primero tiene que ver con el derecho a conocer los orígenes. El segundo tiene que ver con el derecho a las familias, a la memoria de esas familias que fueron a quienes se les sustrajeron sus hijos y sus hijas; y el derecho, en consecuencia, de que el Estado señale por qué pasó eso, tiene que ver en algún sentido con la reparación de la memoria de esas familias. Y la tercera es que la sociedad chilena sepa la verdad del porqué una legislación permeable, pero además personas inescrupulosas, utilizaron una facilidad regulatoria para usos completamente indebidos”, añadió.

En este sentido, el ministro indicó que “hay una cantidad importante de organizaciones de la sociedad civil organizadas en ONG nacionales y extranjeras que están permitiendo esos encuentros. Y el Presidente de la República nos ha pedido que abordemos la manera de hacernos cargo de estas tres cosas: permitir que las familias, esas personas, tengan derecho a conocer su origen; restablecer la memoria de las familias afectadas; y que el país conozca las verdaderas razones que estuvieron detrás de esas adopciones irregulares”.