Un informe del Ministerio de Salud reveló que en 2022, más de 44 mil personas fallecieron mientras esperaban ser atendidas en una lista de espera.
Según datos recogidos por diario El Mercurio, de ese total, 38.564 pacientes buscaban una atención de especialidad o una cirugía no incluida en el Plan AUGE; mientras que los otros 5.437 murieron aguardando un tratamiento GES.
Las listas de espera no es un tema nuevo, sin embargo, durante y tras la pandemia, los tiempos se fueron extendiendo mayormente. Esto genera que sean cientos de miles los pacientes del sistema público de salud que aguardan meses e incluso años para ser atendidos en una consulta de especialidad o una cirugía.
Hace unos días, un informe de auditoría que realizó la Contraloría al Hospital Sótero del Río, detectó la realización de un centenar de cirugías a funcionarios y sus familiares, saltándose las amplias listas de espera.
Esto provocó que el Consejo para la Transparencia otorgara un plazo de 10 días a la ministra de Salud, Ximena Aguilera, para entregar información respecto a este tema.
Listas de espera
El 2022 fue el año donde se alcanzó la mayor cifra de personas fallecidas esperando una atención oportuna, puesto que en 2021 habían sido 37 mil en listas de espera no GES y 3.683 en listas de espera GES, y en 2020 fueron 31 mil y 2.817, respectivamente.
El académico del Instituto Salud Pública (ISP) de la UNAB, Manuel Inostroza, comentó que “en la medida que no se disminuyen las personas entrando en listas de espera, el riesgo de morir estando en lista de espera crece”.
“Desde el primer año que se mide, que es el año 2016, las muertes han crecido en un 165% (…). El total de personas muertas en listas de espera han sido 161.158 personas en estos cinco años que se han medido, y por GES 13.992”, precisó.
Cabe recalcar que existen casos donde las personas no necesariamente mueren a raíz de la patología por la que estaban en lista de espera. Según los datos recopilados por El Mercurio, el informe menciona que en el caso de las garantías GES retrasadas, que muestran una notoria alza, el fallecimiento de cerca del 22% de los pacientes (1.182 casos) podría haber estado asociado con el tiempo que esperaron.
El investigador del Instituto de Políticas Públicas en Salud de la Universidad San Sebastián, Raúl Aguilar, señaló que eso es preocupante porque “el mismo ministerio está diciendo que hay una posible asociación entre la garantía no cumplida (y la causa de muerte). Que el sistema llegó tarde. Eso es muchísimo, alguien podría demandar al Estado”.
Por su parte, el exsubsecretario de Redes Asistenciales y decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma, Luis Castillo, indicó que “lo más significativo es que cuando uno mira las prestaciones GES no atendidas, que han sido retrasadas y han muerto, un porcentaje significativo están asociadas a cáncer gástrico, de pulmón, de colon y mama. Y eso es bien complicado”.