Dorothy Pérez sigue marcando firme su paso como contralora general de la república subrogante, aplicando cambios largamente solicitados por la Asociación Nacional de Funcionarios/as (Anec).
Y si ayer se conoció que en su primer día como contralora subrogante, Dorothy Pérez —la misma que el excontralor Jorge Bermúdez despidió y luego tuvo que reintegrar por orden de la justicia—, eliminó seis unidades, pidió la renuncia de algunos funcionarios y creó la División de Gobierno Regionales y Municipalidades, hoy se supieron nuevos cambios.
Según publicó La Segunda, después de casi 20 años en que los sueldos eran reajustados a criterio del contralor, Dorothy Pérez reincorporó un mecanismo automático de mejoramiento de grados. Utilizará un 30% del total del dinero destinado a esos fines, considerando como eje fundamental la antigüedad y las calificaciones de los funcionarios.
Otro de los cambios que aplicó la contralora fue aceptar y promover ascensos que consideren los nuevos estudios técnico o profesionales de los trabajadores; ampliar y mejorar las oficinas de la Anec y reutiliza mobiliario dado de baja para mejorar las instalaciones de los centros vacacionales de los funcionarios.
En tanto que también implementará un sistema para agilizar la toma de razón de bases de licitación, pero advirtiendo desde un comienzo a la autoridad respectiva de las materias en que se centrará la fiscalización, la que se espera sea más dura.
Dorothy Pérez también se acercó a María Soledad Frindt, quien había sido nombrada como subcontralora titular por Bermúdez en reemplazo de Pérez, cuando quiso echarla y la Suprema no se lo permitió. Frindt, luego de eso, sufrió una especie de “degradación” al tener que volver a sus labores.
Por otro lado, nombró a Priscila Jara como jefa de la nueva división de gobiernos regionales y municipalidades. También nombró a Víctor Hugo Merino como jefe de la división Jurídica.