El gobernador Metropolitano, Claudio Orrego, y el alcalde de Padre Hurtado, Felipe Muñoz, interpusieron -en el Juzgado de Garantía de Talagante- una querella en contra de quienes resulten responsables del delito de homicidio de Anthony Navarro, el niño de 5 años que fue asesinado por desconocido, en un aparente ajuste de cuentas, en la Villa Las Aralias.

Orrego indicó que “no se puede seguir normalizando el que sigan muriendo personas producto de delincuentes cada día más violentos y que actúan con armamento de fuego.”

Además, anunció la entrega de dos radiopatrullas, tres autos de seguridad ciudadana, dos motos y doce kits de seguridad para el municipio de Padre Hurtado, los cuales serán financiados por el Gobierno Metropolitano.

La autoridad regional afirmó que nadie se puede restar ante la problemática de seguridad, solicitando sentido de urgencia al Parlamento y al Gobierno.

Orrego aclaró que sus dichos no son sólo “palabras bonitas” para adornar un titular de prensa.

Esto, en respuesta a las declaraciones del subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, quien -consultado por la medida de estado de excepción que están solicitando algunos alcaldes- indicó que la ciudadanía merece acciones concretas y no frases bonitas para aparecer en los medios, refiriéndose a las últimas declaraciones de Orrego.

El alcalde Felipe Muñoz sostuvo que son insuficientes las capacidades de respuesta de las policías en Padre Hurtado y que están pensando en decretar emergencia comunal, aunque aclaró que no tienen recursos como otros municipios.

Además, el jefe comunal afirmó que no son partidarios de entregar labores de seguridad a vecinos y vecinas.

Las indagatorias de la Policía de Investigaciones continúan para poder dar con el responsable del homicidio del niño de 5 años, en la comuna de Padre Hurtado.